Cardenal iraquí: el nacimiento de Cristo, mensaje de esperanza para una humanidad nueva

Mar Sako: en Jesús, el ejemplo de humanidad que hay que seguir. De los cristianos una contribución esencial para el renacimiento del país. La unidad entre fe y etnias diversas es la base sobre la cual construir el futuro. La misa de la vigilia en Bagdad concelebrada con el secretario de Estado Vaticano. La visita de Parolin, ¿prepara un futuro viaje del Papa en Irak?

Bagdad (AsiaNews)- El período de Adviento que prepara la venida de Cristo es una ocasión de “renacimiento para la naturaleza humana”, que de “bestia depredadora” se eleva a “ser completo y perfecto” según un ideal de “humanización” (“mithbarnashutha”, en lengua sirio-caldea). Es cuanto escribe el primado caldeo, el Card. Louis Rafhel Saka, en el mensaje de Navidad dirigido a los cristianos iraquíes y enviado a AsiaNews. “Cada ser humano- prosigue el purpurado- encuentra en Jesús un ejemplo perfecto de humanidad que hay que seguir y se conforma a la imagen de Dios”.

En una nación turbada por las recientes guerras, violencias, amenazas yihadistas hasta ahora presentes, inestabilidades políticas y un lento camino de democratización, el valor “de la unidad” entre ciudadanos de etnia y religión diversa representa el fundamento sobre el cual construir el futuro. Una misión a la cual son llamados también los cristianos “a través del testimonio de nuestra fe, de las oraciones, del amor al prójimo” y con “la contribución de cada uno en el renacimiento de nuestro país”.

El cardenal iraquí celebrará la misa de la vigilia de Navidad junto al secretario de Estado Vaticano y brazo derecho del Papa Francisco, el Card. Pietro Parolin. Por primera vez en la historia el más estrecho colaborador de un pontífice irá en visita oficial en Irak, del 24 al 28 de diciembre; él visitará la capital Bagdad, Erbil y algunas pequeñas ciudades cristianas de la llanura de Nínive.

Fuentes católicas de AsiaNews en Irak subraya que el viaje de parolin podría representar la premisa para una visita, en un futuro próximo, de un Papa al país árabe.

Volviendo al mensaje de Navidad del patriarca caldeo, él subraya que en el nacimiento y en el testimonio del Cristo viviente encuentran “pleno cumplimiento” los sufrimientos, la muerte y la resurrección. “No obstante las muchas maldades que albergan en el hombre- agrega- el cristiano posee gracias suficientes para llevar a cumplimiento el proyecto de renovación interior”.

A través de los Sacramentos, como el Bautismo y la Eucaristía, “recibimos la gracia de la unidad en Jesucristo y somos por Él abrazados”. Una llamada, subraya el purpurado, que requiere “un compromiso cotidiano, coraje y duro trabajo” y que está dirigida “ a todos los hombres de buena voluntad, que se abren en modo sincero a la gracia de Dios”, en una óptica común de “hermandad, amor y paz” que se refiere al género humano, sin distinciones.

Dirigiéndose a los fieles, el primado caldeo recuerda la “centralidad” de la fe en la vida de cada hombre y la importancia de la oración y de la participación a la vida de la comunidad. El ser cristiano, agrega, pide un cotidiano “testimonio de fe, de oración y de servicio” a los otros. “La fe-advierte- prepara el terreno a la vida según la Palabra de Dios y ayuda a ser hijos de Dios, más que siervos del demonio”. “Espero que la Navidad-concluye el purpurado- sea una ocasión para reforzar la fe y testimoniar el servicio de amor y de paz” como deseado por el Papa Francisco. “Y cuántos son fuente de división, crean caos y confusión exasperando los preceptos de la religión, de la etnia o del género no creen en Dios y no tienen título para definirse hombres de fe”.