Card Sako: Eid al-Fitr, ocasión de paz y reconciliación para musulmanes y cristianos

El islam celebra la finalización del Ramadán, el mes sagrado de ayuno y oración. Los fieles podrán consumir de nuevo la comida a la luz del día. La fiesta es ocasión de beneficencia y solidaridad. El patriarca caldeo: momento de meditación, para olvidar las diferencias y perdonarse, Desarrollo del país y la región.

Bagdad (AsiaNews) - En ocasión de la fiesta de Eid al-Fitr “dirijo mis más sinceras congratulaciones y mis mejores augurios” a todos los musulmanes “nuestros hermanos en la humanidad”, pidiendo a Dios “que los proteja y también a nuestro país” del “mal”, Es cuanto escribe el patriarca caldeo, Card. Louis Raphael Sako, en el mensaje a los fieles del islam- y enviado para su conocimiento a AsiaNews- en ocasión de las celebraciones por la finalización del Ramadán, el mes sagrado de ayuno y oración. La fiesta, explica el prelado, es una ocasión para todos, también para los cristianos “de renovación personal, para olvidar las diferencias, perdonarse y buscar una reconciliación”.

La festividad está programada para mañana, 4 de junio y marca la finalización del mes de oración y ayuno y se concluirá la noche del día sucesivo. En la ocasión los musulmanes agradecen a Alá por haberles dado la fuerza y bendiciones, en la esperanza que el mes sagrado de Ramadán los haya acercarse a Dios y a la perfección pedida a cada creyente.

El primero en celebrar el ’Eid al-Fitr fue el mismo Mahoma en el año 624 d.C, después de una batalla importante. Los festejos cambian según la pertenencia al mundo sunnita o chií o de los lugares de origen; en general los musulmanes se reúnen en las mezquitas o al aire libre, como los parques, para recitar las oraciones de la mañana.

Al final se reúnen para consumir la comida, el primero a la luz del día. Las celebraciones continúan por 3 días y son consideradas como la fiesta nacional en los países de mayoría musulmana. A esto se agregan actos especiales de caridad como almuerzos o banquetes para los más pobres. El Eid al-Fitr es ocasión de encuentro entre cristianos y musulmanes y el Pontificio consejo para el diálogo interreligiosos prepara cada año un mensaje oficial.

Para el patriarca caldeo una verdadera reconciliación es también premisa para “remover las barreras que no separan”, al fin de “reforzar las relaciones, vivir en armonía y colamar el ambiente que no rodea de amor y alegría”. Después de la agonía, los sufrimientos, los asesinatos, las destrucciones y las evacuaciones, agrega el purpurado, “que los iraquíes tuvieron que experimentar” hoy están en la búsqueda de una “vida pacífica, en una óptica de fraternidad humana”, fundada en la dignidad y el respeto recíproco. A los líderes en cambio les toca la tarea de garantizar a todos, cristianos y musulmanes, “iguales derechos y deberes”.

Este cambio, concluye el card. Sako, debe suceder “desde adentro de nosotros, no desde el exterior o por manos de otros”. Teniendo presente, agrega que los iraquíes- después de las violencias que han seguido a la invasión de los EEUU en 2003 y la derivación yihadista con al-Qaeda y el Estado islámico- “no tienen más la energía para soportar otros conflictos”. “Al contrario, los iraquíes -concluye-no ven la hora de liberarse del miedo, ansia, pobreza, enfermedades y corrupción para alcanzar un verdadero desarrollo para el país y toda la región”.