CPJ: récord de periodistas encarcelados en 2021, la mayor represión en China

El número total de reporteros en la cárcel este año ha pasado de 280 en 2020 a 293. Los primeros países son China, Myanmar y Egipto. Por primera vez detuvieron por su trabajo a periodistas de Hong Kong. Al menos 24 reporteros asesinados, el último en Filipinas.

El Cairo (AsiaNews) - China, Myanmar y Egipto son los tres países del mundo donde es más peligroso trabajar como periodista, con una práctica generalizada de detenciones y persecuciones por artículos y reportajes no alineados con el poder. Así se desprende del informe anual que publicó en los últimos días el Committee to Protect Journalists (CPJ), un consorcio independiente con sede en Nueva York (Estados Unidos), según el cual el número de periodistas encarcelados pasó de 280 en 2020 a 293 durante el año en curso: un verdadero récord.

A la cabeza de la clasificación, por tercer año consecutivo, encontramos la China de Xi Jinping con 50 periodistas actualmente entre rejas (es la cifra oficial, pero en realidad podría ser muchos más). La novedad es que el recuento de este año también incluye periodistas de Hong Kong - detenidos en virtud de la infame ley de seguridad nacional impuesta por Beijing - entre ellos los del diario prodemocrático Apple Daily, que posteriormente se vio obligado a cerrar. En China continental una de las acusaciones que se utilizan para enviar a los periodistas a prisión es "fomentar disturbios" o "sembrar discordia", lo que permite controlar cualquier forma de disidencia.

La lista no tiene en cuenta a 11 personas que teóricamente no son periodistas pero terminaron en prisión por proporcionar "material sensible" al diario disidente Epoch Times. Además, más de una docena de cronistas y comentaristas han sido arrestados por informar sobre la "crisis en Wuhan" - la difusión de la pandemia de covid-19 - sin respetar la narrativa "oficial" del gobierno.

En segundo lugar se encuentra Myanmar que desde el golpe militar de febrero, que derrocó al gobierno civil democrático liderado por Aung San Suu Kyi, ha enviado a 26 periodistas a la cárcel (cuando no había ninguno), registrando el crecimiento más marcado de todo el mundo. Fuentes cercanas al CPJ informan que hay muchos más reporteros en prisión, pero se encontrarían detenidos de forma anónima o los habrían hecho desaparecer.

Egipto está en el último escalón del podio, pese a que hay dos periodistas menos (bajaron de 29 a 27) encerrados en las cárceles del país. Según el informe, las autoridades de El Cairo operan en el total desprecio de las leyes nacionales, que limitan "la prisión preventiva a dos años", presentando "más" y ridículas acusaciones "para extender el período" de detención. Otro recurso es imponer "condiciones" para la liberación de aquellos "que ya han cumplido su condena".

En cuarto y quinto lugar encontramos respectivamente a Vietnam y Bielorrusia - que se considera "la última dictadura de Europa" - luego Turquía, Eritrea y Arabia Saudita, y a continuación Rusia e Irán. Joel Simon, director ejecutivo del CPJ, señala que "por sexto año consecutivo" se registran "cifras récord de periodistas encarcelados en todo el mundo". Un hecho, afirma, que refleja “dos desafíos inextricables: los gobiernos están decididos a controlar y gestionar la información y son cada vez más descarados en sus esfuerzos por hacerlo.

Por último, el CPJ también dio a conocer los datos relativos a las víctimas: al menos 24 periodistas fueron asesinados en 2021 debido a su trabajo. Los dos primeros países del mundo son la India (4 muertes confirmadas) y México. El último homicidio tuvo lugar en estas horas en Filipinas. En Calbayog, a casi 500 kilómetros de Manila, un hombre armado disparó en la cabeza a Jesús Malabanan, de 58 años. Corresponsal del Manila Standard, también fue colaborador de la agencia de noticias Reuters, que gracias a su valioso trabajo de documentación ganó el Pulitzer en 2018 por las investigaciones sobre la lucha contra las drogas.