Bình Dương: El covid ha hundido empresas y empobrecido a los trabajadores, sobre todo a los migrantes

de Tran Hung

La zona forma parte del polo productivo nacional más importante, con Ciudad Ho Chi Minh y Đồng Nai. El gobierno provinciale trabaja para reactivar las empresas y sostener el empleo. Pero la circulación del virus todavía impone distanciamientos y cierres. Una trabajadora está convencida de que las vacunas son “la clave” de la recuperación.

Bình Dương (AsiaNews) - La reactivación de las empresas locales, para favorecer la ocupación y sostener a las categorías más débiles afectadas por la crisis económica y social que desencadenó la pandemia de covid-19 - sobre todo entre los trabajadores migrantes - es el principal objetivo del gobierno de la provincia de Bình Dương, en el sur de Vietnam, que con Ciudad de Ho Chi Minh forma parte de lo que se denomina el "triángulo productivo" del país. Para poder alcanzarlo, explican, es necesario "apoyar a las empresas, impulsar los negocios y crear puestos de trabajo".

La provincia de Bình Dương tiene cerca de 50.000 empresas, con más de 1,2 millones de trabajadores que también proceden de otras provincias y ciudades de Vietnam. En su interior hay 29 parques industriales con 2.000 empresas y 485.670 empleados, de los cuales 14.900 son mano de obra proveniente del exterior, principalmente de países asiáticos de la región.

Vietnam ha sido capaz de contener los contagios de covid-19 durante mucho tiempo sin renunciar al trabajo ni a la movilidad y fue tomado como modelo por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Una política de vacunación ineficiente, que recurrió al uso de sueros chinos que en la práctica han resultado poco eficaces, sumado al ingreso de la variante Delta, trajo como consecuencia el aumento de los casos e impuso severos confinamientos.

Toda la provincia de Bình Dương se vio afectada por la cuarta ola, que comenzó el 27 de abril de 2021, y el virus se difundió en los centros urbanos y en las empresas. Los cierres y la falta de apoyo han provocado una crisis muy grave, sobre todo entre los migrantes económicos (extranjeros e internos) y especialmente entre las mujeres migrantes, que son las más desfavorecidas en esta pandemia.

Decenas de miles de personas perdieron su trabajo debido al covid-19 y han quedado fuera del mercado laboral, sin perspectivas para el futuro inmediato. El virus ha paralizado las empresas y ha interrumpido la producción, los servicios e incluso las actividades espirituales. Las medidas aún vigentes, como el distanciamiento social y las severas restricciones, impiden en la práctica la recuperación económica y la reactivación del empleo, aunque ya se pueden ver los primeros signos de un cambio de rumbo. Estos grupos viven en condiciones de pobreza y toda la economía provincial ha sufrido una fuerte desaceleración tras veinte años de vigoroso crecimiento.

Ayer Vietnam registró 9.342 casos nuevos, sobre un número total de 203.989 desde el 27 de abril de este año. Solo en la zona de Bình Dương hay 3.793 contagios nuevos, aunque el gobierno de la provincia ha fijado el 15 de octubre como fecha límite para controlar la pandemia. “Este año nuestra vida —cuenta a AsiaNews una mujer llamada Thanh Tung— se ha arruinado por completo. En mi empresa, muchos trabajadores migrantes o sus familias han muerto por la epidemia. Otros han contraído grandes deudas. Nuestra situación sigue siendo muy precaria”. Esta pandemia, concluye, “todavía va a durar mucho. La clave es la vacunación de las personas. Y tenemos que aceptar convivir con el virus”.