Bishkek: los medios independientes luchan por la libertad de prensa

de Vladimir Rozanskij

Azattyk, una rama de Radio Svoboda, está en la mira del gobierno. Se la acusa de haber mostrado los choques fronterizos con Tayikistán. En Asia Central, Kirguistán era el único país con una mínima libertad de expresión.

Moscú (AsiaNews)- El gobierno de Kirguistán ha pedido a la Justicia que suspenda las actividades de la agencia Azattyk Media, la sección local de Radio Svoboda, como medio de información masiva. La razón es la negativa de los periodistas a retirar el material de vídeo relativo a los enfrentamientos fronterizos entre Bishkek y las tropas tayikas el verano pasado.

La decisión del 23 de enero provocó una fuerte reacción en todo el mundo del periodismo y en la sociedad kirguisa, donde desde hace tiempo se denuncian intentos de coartar la libertad de prensa y de expresión. La clausura de Azattyk, afirma un comunicado compartido por muchas organizaciones, supondría no sólo una limitación de la libertad y el pluralismo en el mundo de la información sino también "una violación del derecho de los ciudadanos a tener acceso a las noticias sobre los temas más importantes y acontecimientos decisivos para la vida de la nación".

El recurso se presentó ante el Ministerio de Cultura de Bishkek, solicitando que se anule la decisión del tribunal y termine la presión sobre la agencia, cuyas actividades y administración están bloqueadas desde hace dos meses debido a las medidas del gobierno. Los periodistas de Azattyk están convencidos de que han actuado de manera profesional y tienen la intención de "seguir prestando nuestro servicio a nuestra numerosa y leal audiencia", según ha confirmado Jamie Fly, presidente y director general de Radio Svoboda.

Žanarbek Akaev, diputado de la oposición en el Žogorku Keneš (Parlamento), intervino preguntando “¿Quién le teme a Azattyk? Los ladrones y los que quieren ocultar sus crímenes, aquellos que no quieren que se hable de los errores cometidos en situaciones cuestionables y dramáticas, como los choques en la frontera... no se puede creer que realmente quieran cerrarla".

Radio Svoboda difunde información en 30 países y en 27 idiomas diferentes. A menudo es una fuente casi exclusiva en zonas del mundo con acceso muy limitado, como los países ex soviéticos de Asia Central. Reporteros Sin Fronteras también intervino en su defensa, publicando un llamamiento en el sitio web oficial en el que recuerda que la clausura de Azattyk “se suma a la deportación ilegal a Rusia del periodista de investigación Bolot Temirov”. El 23 de noviembre Temirov, corresponsal de Azattyk, fue embarcado en un avión con destino a Moscú -porque tiene doble nacionalidad- y puesto bajo arresto domiciliario en la casa de su madre, en la capital rusa. Las autoridades kirguisas tomaron la decisión sobre la base de "informes secretos" de los servicios de seguridad, sin dar ninguna otra explicación.

La directora de Reporteros Sin Fronteras para Europa del Este y Asia Central, Jeanne Cavelier, declaró que "se consideraba que Kirguistán era una excepción en la región, un país con una prensa relativamente libre, pero ahora está dando un giro decididamente autoritario”. La acusación que respalda el ministerio kirguís se basa en la norma que “excluye la propaganda de guerra, violencia y crueldad, intolerancia religiosa y nacionalista, e intolerancia hacia otros países y pueblos”.

El equipo completo de Radio Svoboda, asegura Fly, está decidido a utilizar todos los medios legales disponibles para evitar que se cierre Azattyk en Kirguistán, y a seguir apoyando la libertad de investigación periodística en todos los países. La lucha por la libertad de expresión concierne no solo a un país o una región del mundo sino a la dignidad humana en todas las latitudes, y también debe seguir siendo una estrella polar en Kirguistán.