Beirut: enfrentamientos entre manifestantes y grupos chiítas. Card. Raï: a los políticos les falta coraje

Anoche se enfrentaron manifestantes y sostenedores de Hezbollah y Amal. El saldo es de cinco heridos, sin lesiones graves. Soldados y agentes de la brigada antidisturbios debieron intervenir para separar a los dos frentes. El patriarca maronita exalta la “decisión valiente y libre” de los ciudadanos que salen a las calles, y apoya sus reclamos.

Beirut (AsiaNews/Agencias) - Anoche estallaron enfrentamientos entre algunos manifestantes opositores al gobierno y los sostenedores de los movimientos chiítas (filo-iraníes) Hezbollah y Amal en las calles de Beirut, que desde el 17 de octubre ha devenido escenario de protestas contra el gobierno, que culminaron en la dimisión del premier Hariri. El motivo detrás de la escalada de tensión es el bloqueo que llevan adelante los manifestantes en uno de los puentes más importantes de la capital.

Hace cinco semanas que los manifestantes exigen la renuncia de toda la clase dirigente y la conformación de un nuevo liderazgo en el gobierno del país de los cedros. El saldo de los enfrentamientos de anoche es de cinco heridos, pero ninguno reviste gravedad.

Tanto Hezbollah como Amal conformaron la coalición de gobierno que apoyó al Primer Ministro Saad en su último mandato, al cual presentó su dimisión el 29 de octubre pasado. Hezbollah se opuso enérgicamente, y en vano, a la dimisión del jefe de gobierno.

Soldador y agentes de la brigada antidisturbios formaron una barrera para dividir a los manifestantes de los sostenedores de los dos grupos chiítas, que se enfrentaron sobre el Ring Bridge, una de las vías de circulación más importantes de la capital. Ambos frentes chocaron, arrojándose losas y piedras. Las fuerzas de seguridad recurrieron a los gases lacrimógenos para dispersar a la multitud.

Previo a ello, los sostenedores de Hezbollah y Amal habían enarbolado banderas de los dos grupos, al canto de “chiítas, chiítas”, y de otros eslóganes en apoyo de Hassan Nasrallah, el líder de Hezbollah. Por su parte, los manifestantes, opositores al gobierno, respondieron gritando “Revolución, revolución”. El detonante de los enfrentamientos habría sido - según los grupos chiíes - la seguidilla de coros ofensivos entonados por los manifestantes contra Nasrallah.

La crisis política e institucional que atraviesa el Líbano fue el tema retomado ayer, en la misa dominical, por el patriarca maronita, el Card. Beshara Raï, quien acusa a la clase dirigente de una “falta de coraje”, mientras elogia la fuerza de los manifestantes en la plaza. “A los dirigente políticos libaneses - dijo el purpurado - les falta coraje. Son incapaces de tomar decisiones valientes, a favor del Líbano y de su pueblo, porque están presos de sus intereses y de sus lazos con el exterior”.

“Agradezco a Dios - prosiguió en la homilía - que no falta el coraje en nuestro pueblo, con su revuelta pacífica y civilizada. Han venido de todas la regiones, de todas las comunidades y de todas partes, se han unido y han tomado una decisión valiente y libre. Reclaman deliberaciones parlamentarias conforme a lo que marca la Constitución, y la formación, a la mayor brevedad, de un gobierno que restablezca la confianza [en el país], que ponga en marcha reformas, que luche contra la corrupció, recupere el dinero robado y obre apuntando a un crecimiento económico”.