Beijing: la renuncia de los parlamentarios de Hong Kong es ‘una farsa’ y ‘un desafío abierto’

de Paul Wang

Duro comentario de la Oficina de Hong Kong y Macao - una especie de representación de China en el territorio - ante el gesto de dimisión de 15 legisladores pro democracia. Para Beijing, ello atenta contra la Basic Law, el gobierno de Hong Kong y la soberanía de China. Johannes Chan, de la Universidad de Hong Kong: China siempre está por encima de la ley. Esto reduce la confianza de la gente en el estado de derecho. Estados Unidos: La dictadura del Partido Comunista Chino se extiende a Hong Kong.

Hong Kong (AsiaNews) – La dimisión masiva de 15 miembros de la corriente democrática del LegCo (el parlamento de Hong Kong) es "una farsa" y "desafía" la autoridad de la Basic Law, (la mini-constitución del territorio) e incluso de Beijing.

La Oficina de Hong Kong y Macao (una especie de oficina de representación de China en el territorio) calificó así la decisión del bloque opositor de abandonar el LegCo. Los legisladores optaron por renunciar tras la expulsión de cuatro legisladores por razones de “seguridad”, según alegó Beijing. Los cuatro parlamentarios son: Alvin Yeung, Kwok Ka-ki, Dennis Kwok y Kenneth Leung.

Un vocero de la Oficina de Hong Kong y Macao denunció la renuncia en masa como un intento de ofender al Comité Permanente de la Asamblea Nacional del Pueblo, que adoptó la resolución contra los cuatro legisladores. Defendió la medida, remarcando que ello promueve un funcionamiento más tranquilo del LegCo y garantiza la “estabilidad” en la sociedad.

El desempeño de estos diputados de la oposición es "una farsa" que "se opone a la jurisdicción global de Beijing sobre Hong Kong". No son leales a la Basic Law y al gobierno de Hong Kong.

“Estos legisladores – agregó - se equivocan si esperan usar su renuncia para provocar una oposición radical y suplicar una interferencia del exterior”.

Lo cierto es que muchas figuras consideran que es ilegal la medida de Beijing de castigar a los cuatro legisladores. El Prof. Johannes Chan, de la Universidad de Hong Kong, dijo que no hay un fundamento claro en la resolución de Beijing: “Hemos visto que el Comité Permanente de la Asamblea General del Pueblo se coloca por encima de la ley. Puede tomar cualquier decisión o poner freno a cualquier medida sin atenerse a los procedimientos que marca la Basic Law. Es inevitable que la gente piense que esto amenaza la confianza en el estado de derecho. Parece que la Basic Law es cada vez más irrelevante para Hong Kong”.

Estados Unidos condenó la expulsión de los cuatro legisladores. Para Robert O’Brien, Consejero de Seguridad de los EE.UU, el Partido Comunista Chino ha cometido una “flagrante violación” de su compromiso con Hong Kong. En una declaración, afirmó que el “[el principio] Un país, dos sistemas no es más que una hoja de parra que oculta la expansión de la dictadura del Partido sobre Hong Kong”.