Beijing corta comunicaciones con Taipéi. Los motivos: “una sola China” y espionaje

Acusan a Taiwán de mantener silencio sobre el principio de "una sola China" durante la ceremonia de la toma de poder de la presidente Tsai Ing-wen el 20 de mayo pasado. Ayer, Camboya deportó taiwaneses a China, acusándolos de espionaje telefónico. Este año Kenia y Malasia también deportaron a decenas de taiwaneses por la misma sospecha, para que sean procesados por Beijing.

Taipéi (AsiaNews/Agencias). Los sistemas de comunicación “entre ambas márgenes del Estrecho” fueron suspendidos”. Lo declaró An Fengshan, vocero de la Oficina china para los negocios con Taiwán.

La conferencia de prensa tenía como tema la cuestión de los taiwaneses sospechados de llevar a cabo actividades de espionaje telefónico, arrestados en Camboya y enviados a China para ser procesados (v. foto). Ma An subrayó que el motivo de la suspensión de las relaciones fue que el gobierno de Taipéi ha faltado en reconocer el principio de “una sola China”.

En efecto, el 20 de mayo pasado, en la toma de poder de la nueva presidente Tsai Ing-wen, este principio no fue citado. Sin embargo, Tsai subrayó su voluntad de continuar en buenas relaciones con la República popular de China.

El principio de “una sola China" fue redactado en 1992 por los políticos de Beijing y de Taipéi, y si bien éste reconoce que hay una sola China, se deja librado a cada parte cómo ha de interpretarse este término. De hecho, China piensa que Taiwán pertenece a la única China que existe, y la isla está en una actitud de “rebelión”. Taipéi, por su parte, piensa que la verdadera China es la República de China, y tiene la idea de que, tarde o temprano, ésta será reunificada al gobierno de la isla.

En realidad, Beijing teme que, con la subida al poder del Partido democrático -que en el pasado manifestó visiones independentistas-, Taiwán se convierta en una madriguera de enemistad con el gobierno de la República popular.

La ocasión para doblegar a Taiwán fue brindada por Camboya, donde fueron descubiertos treinta y nueve chinos y taiwaneses implicados en actividades de espionaje telefónico. Ayer, Phnom Penh decidió transferirlos a todos a Wenzhou (Zhejiang) para iniciar un proceso, no obstante Taiwán había pedido continuamente que los taiwaneses acusados de crímenes fueran llevados a la isla, para ser procesados allí.

Durante este año, decenas de taiwaneses implicados en actividades de espionaje telefónico en Kenia y en Malasia, fueron transferidos a China, provocando ásperas críticas del gobierno de Taipéi, que a su vez, fue tildado de incapaz por su mismísima población.