Bartolomé: Con Francisco invitamos a todos los cristianos a celebrar el primer sínodo de Nicea en 2025
Estambul (AsiaNews)- De su regreso de Jerusalén, del encuentro con el Papa Francisco en el Santo Sepulcro, el Patriarca ecuménico de Constantinópolis, Bartolomé I, reveló una importante cita para la unidad entre católicos y ortodoxos: encontrase juntos en 2025 en Nicea, lugar donde se celebró el primer verdadero concilio ecuménico de la Iglesia indivisa.
Hablando en exclusiva a AsiaNews, Bartolomé dijo que junto al Papa Francisco "hemos concordado de dejar como heredad a nosotros mismos y a nuestros sucesores el encontrarse en Nicea en 2025, para celebrar todos juntos, después de 17 siglos, el primer Sínodo realmente ecuménico de donde salió el Credo".
El concilio de Nicea (hoy Iznik, a 130 km de Estambul) reunió en el año 325 a más de 300 obispos de oriente y de occidente y es considerado el primer verdadero concilio ecuménico. En tal concilio se constituyó el Credo, similar al que se recita también hoy durante la liturgia, afirmando que Jesús comparte "la misma substancia del Padre", contra la ideología ariana.
Bartolomé encontró a Francisco a 50 años del abrazo histórico entre Pablo VI y Athenagoras. El encuentro de 1964 rompió el largo silencio de siglos entre oriente y occidente cristianos, con todas las consecuencias socio-políticas que surgieron, y de las cuales Europa aún sufre.
El encuentro en el Santo Sepulcro en estos días dona nuevamente una renovada linfa al diálogo entre católicos y ortodoxos, a dos visiones cristianas que si bien en la diversidad, tienen una común visión de los sacramentos y de la tradición apostólica.
"El diálogo por la unidad entre católicos y ortodoxos- dijo Bartolomé a AsiaNews- reparte de Jerusalén. En esta ciudad, en el próximo otoño, se realizará un encuentro de la Comisión mixta católica-ortodoxa, hospedada por el Patriarca griego-ortodoxo Teófilo III. Es una camino largo en el cual todos deben comprometerse si hipocresías".
"Jerusalén-continuó Bartolomé- es el lugar, la tierra del diálogo entre Dios y el hombre, el lugar donde se encarnó el Logos de Dios. Nuestros predecesores, Athenágoras y Pablo VI han elegido este lugar para romper el silencio durado siglos entre las dos Iglesias hermanas".
"He caminado con mi hermano Francisco en esa Tierra Santa no con miedos o temores de Cleofás y Lucas en el camino hacia Emaús (Cfr. Lc. 24,13-35), sino inspirado por la viva esperanza como nos enseña Nuestro Señor".
05/12/2016 17:00
15/09/2017 14:19