Bangkok, la misericordia, de acuerdo con la juventud: el reto de semanario católico tailandes

de Weena Kowitwanij

Con motivo del Jubileo extraordinario, la revista Udomsarn dio espacio a los jóvenes católicos del país, recibiendo sus reflexiones sobre la misericordia: "No es sólo un sentimiento de lástima, sino hacer algo por la felicidad del otro". Muchos niños tailandeses participarán en la JMJ de Cracovia en julio.

Bangkok (AsiaNews) – La misericordia no es sólo un sentimiento de piedad sino la necesidad de una respuesta en las acciones de todos los días; Es, ante todo, el deseo de la felicidad de los demás más que de la propia, y pide un testimonio personal. Son algunas de las reflexiones escritas por los chicos católicos tailandeses invitados por el semanario "Udomsarn" para decir cómo van a vivir la misericordia en el Año Santo proclamado por el Papa Francisco. Los chicos, que por hoy han ocupado las columnas de la famosa revista católica, también participarán en el Día Mundial de la Juventud, a celebrarse en Cracovia (Polonia) del 25 al 31 de julio de 2016.

Ptrika Tawornraat es una joven representante de la Iglesia de Nuestra Señora del Perpetuo, en la sureña provincia de Suratthani: "La misericordia - dice - es amar y desear lo mejor para los demás, tener simpatía por ellos y no tener egoísmo. Se desea que las personas que nos rodean sean felices. No es necesario hacer algún gesto de caridad para ser misericordiosos, porque la misericordia es la característica clave que todos deben compartir con los demás".

"La misericordia es algo que hemos aprendido de Dios - escribe Than-nan Polsri, el Centro de Estudiantes de la Universidad Católica -. Si todo el mundo se comportará con misericordia, la empresa sería más feliz y no habría la opresión que a menudo vemos en nuestros días. No hay que esperar que los demás tengan misericordia, sino que nos convierte en testigos de primera mano de ella, y aquellos que nos ven tomando el ejemplo".

También para Chaiwat Orpase, de la diócesis septentrional de Chiang Mai, la misericordia es sobre todo algo para poner en práctica: "Para mí no es sólo un sentimiento de piedad, sino debe haber una respuesta concreta. Otra es el perdonar a alguien, incluso si se es reacio a hacerlo".

En el semanario católico también ha intervenido la hermana Arunee Fruneg, de la congregación de las Hermanas del Sagrado Corazón de Jesús de Bangkok. En su reflexión, la monja define la misericordia "gentileza, compasión, bondad, humildad, y hacer algo para la felicidad de los demás. El mejor ejemplo de esto es Dios Padre, que envió a su único Hijo al mundo, para la salvación de la humanidad. Es el amor incondicional, dado a todos sin distinción".