Bangkok, el Parlamento rechaza la desconfianza al gobierno. Continúa la protesta en la plaza
Bangkok (AsiaNews/Agencias) - La primer ministro Yingluck Shinawatra y el ejecutivo han superado la moción de desconfianza en el Parlamento, presentada por la oposición, mientras continúan las protestas en las plazas, en las calles de la capital y en las provincias del sur de Tailandia. En los días pasados la Primer ministro-acusado de guiar el País "de fachada", en manos del hermano Thaksin- pidió poderes especiales para imponer estado de sitio y el cierre de las calles, para prevenir episodios de violencia. Mientras tanto sobre las tensiones en el país asiático interviene también el secretario general de las Naciones Unidas Ban Ki- moon, que no esconde su propia preocupación, e invita a las partes a la moderación y a "respetar los derechos humanos.
En el Parlamento el gobierno ha tenido suerte en superar la moción de desconfianza de la oposición. La propuesta fue rechazada con 297 votos a favor del ejecutivo y 134 contrarios. Por el momento no se conocen los planes futuros de la oposición, pero parece cierto que la protesta de plaza continúe también en los próximos días.
Yingluck Shinawatra se dijo disponible a entablar tratativas con la oposición, pero el ofrecimiento hasta ahora no fue aceptado. El líder de la oposición- jefe de la protesta- Shutep Thaugsuban declaró que "no habrá ningún coloquio con ella" y "las reformas políticas serán una conquista del pueblo. Los políticos no tendrán ningún rol en la nueva política de la nación".
Las protestas de los anti-gubernamentales (hasta ahora pacíficos) contra los hermanos Shinawatra son las más imponentes desde la crisis del 2010, cuando el reino fue sacudido por una serie de manifestaciones concluidas en un baño de sangre y la muerte de 90 civiles. Según los manifestantes la verdadera eminencia gris es el hermano de Yigluck, Thaksin Shinawatra, el multimillonario en exilio desde hace tiempo para escapar de una condena por corrupción.
Expertos en política thai explican que detrás de la actual lucha contra el ejecutivo y los Tahksin, se esconda el tentativo de "traer a la monarquía al centro de la lucha activa", además de proteger las máximas instituciones del País. A la guía de este movimiento se puso Suthep Thaugsuban- vice primer ministro en tiempos de la masacre de tres años atrás- que se convirtió en héroe popular y jefe en la lucha contra "el régimen de los Thaksin". Sin embargo, advierten los analistas, usar a la monarquía para la lucha política "es peligroso", porque se arriesga el iniciar conflictos y tensiones difíciles de controlar. Detrás de la batalla de Suthep notamos también la incapacidad del Partido democrático, de ganarle en las urnas al Puea Thai Party de los Shinawatra, que goza de un vasto consentimiento en muchas áreas del País.
Desde 2006, Tailandia es teatro, con la caída del ejecutivo guiado por Thaksin, de protestas cíclicas y manifestaciones públicas que contribuyen a alimentar la instabilidad política y social. En encender el último enfrentamiento contra una propuesta de ley gubernamental sobre la amnistía, que habría (entre otros) permitido a Tahksin Shinwatra el poder volver del exilio. La propuesta, rechazada por la Cámara alta recientemente del Parlamento (el Senado), hizo enfurecer hasta a los que apoyan al ejecutivo, porque habrían concedido el perdón a los responsables de la masacre de 2010. Para el gobierno de la primera ministra Yingluck es el momento más crítico de su ascenso al poder en 2011.
17/12/2016 13:14
