Bagdad, del Parlamento a las calles, la crisis político-institucional se agrava cada vez más
Sesiona sólo una parte de los diputados, que pide la expulsión del presidente (sunita) del Parlamento. Mediación fallida del Jefe de Estado. Tras una agitada reunión, la sesión es reprogramada para el 21 de abril. Washington envía su Jefe de Defensa, sorpresivamente, a la capital iraquí. Los fidelísimos a al Sadr llenan (nuevamente) la plaza Tahrir.
Bagdad (AsiaNews) - La crisis política que sacude a Irak y a sus más importantes instituciones se hace cada vez más dramática: hoy, un grupo de diputados, que hace una semana convocaban a una sesión de protesta para desacreditar al presidente del Parlamento (el sunita Salim al Jaburi), ha rechazado la propuesta de mediación planteada por el presidente de la República, el kurdo Fuad Masum. En tanto, se vuelve cada vez más imponente el número de manifestantes que han ocupado la plaza Tahrir, en Bagdad; cercanos al líder religioso chií Moqtada al Sadr, los manifestantes reunidos en las inmediaciones de la Zona Verde rechazan las reformas del premier Haider al Abadi, y piden la formación de un nuevo Ejecutivo “independiente, que esté lejos de los clientelismos confesionales y políticos”.
De acuerdo a lo referido a AsiaNews por un periodista de la emisora nacional al-Iraqia, hay dos instituciones dispuestas a intervenir; la Corte Constitucional, que hasta ahora ha mantenido silencio ante la crisis, y la presidencia de la República.
La oficina del presidente iraquí Masum ha presentado una propuesta de seis puntos para resolver la crisis parlamentaria, que ha sido ilustrada por el vocero de la presidencia de la República, Khaled Shuani, y que es fruto del encuentro mantenido en la noche con los diputados rebeldes. Masum ha invitado a “todos los diputados del Parlamento” a reunirse hoy, a las dos de la tarde hora local, para tratar de “contener la crisis”.
El jefe de Estado insiste en la necesidad de dar la palabra a al Juburi, para que exprese su punto de vista sobre la crisis. Sin embargo, Masum no excluyó la posibilidad de discutir acerca de la dimisión del presidente del Parlamento, en el caso de que fuera a continuar la protesta de diputados, incluso luego de intervenir Juburi en el recinto.
En una suerte de baile de declaraciones y desmentidas, en un primer momento, la oficina de la presidencia del Parlamento había confirmado la intención de al Juburi de acudir al mismo recinto en el cual una semana antes había sido “despedido”, al término de una sesión que estuvo condimentada por el lanzamiento de botellas de agua entre los diputados. Sin embargo, a último momento, Juburi no se presentó en el recinto, prefiriendo evitar participar. Los diputados cercanos al Primer Ministro Haider al-Abadi insisten en que el Parlamento sea disuelto, para así poner fin a la protesta de una parte de la Cámara.
El empellón parlamentario se concluyó hoy, poco antes de las tres, con el retiro de los diputados del Kurdistán y del grupo parlamentarios sunita “Ittihad el Kuwa”, lo cual condujo a la suspensión de la sesión y llevó a que se convocara a una nueva sesión para el próximo 21 de abril.
Por ahora, permanecen sellados los labios de la plana de líderes religiosos de Najaf y Karbala, a la sabia espera de la evolución de los hechos en curso. Según fuentes de AsiaNews, la Marjaaiya de Najaf hace dos días se negó a reunirse con una delegación de miembros revoltosos del parlamento, que venían en busca de apoyo.
Por su parte, el 17 de abril fueron retomadas, respondiendo a la invitación llevada a cabo por el líder Moqtada Al Sadr, las protestas de miles de manifestantes que piden “reformas gubernamentales generales” y “la aceleración del recambio” en las filas del gobierno.
En pocos minutos, el domingo, provenientes de todas partes del país, llegaron a plaza Tahrir cientos de manifestantes del Movimiento Saadrista y miembros de varias tribus, equipados con tiendas, a fin de dar vida a una sentada a largo plazo en el corazón de la capital. Además, decenas de manifestantes se ubicaron en las inmediaciones de algunos ministerios clave, entre los cuales figura el de Asuntos Internos.
El corresponsal de la emisora radiofónica “Radio Sawa” informó a AsiaNews que los sistemas de seguridad “han prohibido a los manifestantes instalar tiendas en las cercanías de los ministerios”, guiándolos rumbo a la plaza Tahrir, donde de día acampan muchas tiendas. En la zona, el gobierno ha desplegado un número masivo de fuerzas del orden, y han vuelto a aparecer las T Walls (vallas de hormigón armado) en las cercanías de la Green Zone de Bagdad, sede de las instituciones de gobierno.
La protesta popular que apoya a los diputados que llevan adelante la revuelta es el fruto del llamamiento lanzado el 16 de abril por Moqtada Al Sadr a los “Hijos del país” y a efectuar las necesarias “presionas que conduzcan a la dimisión de los ministros, como primer paso rumbo a la creación de un gobierno de tecnócratas, tal como es querido por el premier Haider al Abadi” Los tres, presidente-República-Consejo de Ministros y Parlamento, tienen un plazo de tres días para llevar a cabo un nuevo recambio ministerial “con el sucesivo voto de confianza”.
En tanto, la crisis política en Irak es vista con preocupación por Washington, que ayer ha despachado rumbo a Bagdad (en calidad de sorpresa) a su ministro de Defensa, Ash Carter, sin siquiera haberlo consultado primero con el gobierno iraquí. Carter aterrizó directamente en una base aérea militar, acompañado por el anuncio del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, de que, en lo sucesivo, tiene la intención de enviar tropas armadas a Irak. Un anuncio que ha dado lugar a innumerables indiscreciones, no confirmadas, de la voluntad de Washington de poner fin a la crisis de gobierno en Irak, nombrando a un gobierno de emergencia nacional compuesto por diez miembros, con la misión de organizar las elecciones para un nuevo Parlamento y un nuevo gobierno iraquí, que goce de un consenso que sea capaz de impedir el deslizamiento del país rumbo al caos. (PB)
01/09/2021 15:28
17/12/2016 13:14