Atentados contra los cristianos en Lahore: entre las víctimas también 4 musulmanes
Faisalabad (Asianews)- Aumenta a 17 el número de las víctimas de los atentados sucedidos ayer contra dos iglesias cristianas en Youhanabad, Lahore. Esta mañana Khushi Masih y Barkar Masih murieron en el hospital a causa de las heridas recibidas con las explosiones. Con ellos se convierten en 13 los mártires pertenecientes a la comunidad cristiana, incluidos una mujer y un niño de 12 años. Akash Masih. De 15 años es él, el que impidió a uno de los terroristas entrar a la iglesia de S. Juan, bloqueándolo con su propio cuerpo.
Las otras 4 víctimas eran musulmanas. Se trata de Abdul Majeed, oficial de policía; Muhammad Sadiq Irshad (padre e hijo), propietarios de un negocio delante de la iglesia protestante; Muhammad Ramzam, chofer. Sadiq es el que impidió al segundo terrorista penetrar a la iglesia protestante, Christh Church.
Mientras tanto, en todo Paquistán no dejan de manifestar contra los atentados. Siempre hoy, en Lahore un cortejo cristiano desfiló por las calles de la capital Punjab. La situación se volvió tensa después que Mariam Safadar, una docente que chocó a algunos de los participantes: dos personas murieron y 6 resultaron heridas.
Esta mañana en Faisalabad (Punjab) se realizó una protesta organizada por la Association of Women for Awareness and Motivation (Awam), por la Peace and Human Devolopment (hd) y por el Human Rights Defenders Network. Los participantes han pedido a las autoridades que se proteja a los asentamientos, propiedades y lugares de culto cristianos y que se detenga al extremismo de matriz religiosa poniendo en actuación el National Action Plan on Counter Terrorism.
Mons. Joseph Arshad, obispo de la diócesis de Faisalabad, participó en la manifestación de esta mañana. "El gobierno- afirma a AsiaNews-debe aumentar los esfuerzos para proteger las secciones más vulnerables de la sociedad y dar a ellos el apoyo legislativo, administrativo e institucional, además de las infraestructuras para permitirles vivir una vida libre del terror".
Según lo que cuentan algunos testigos, en el momento de los atentados, los 3 agentes puestos de guardia en la Iglesia católica estaban mirando un partido de cricket en un hotel cercano. El p. Bonnie Mendes, de la diócesis de Faisalabad, explica a AsiaNews: "El gobierno ya pidió a las instituciones eclesiásticas que eleven más los muros de las iglesias, rodearlos con alambres de púas e instalar cámaras a circuito cerrado. Pero estas cosas son un gasto enorme para una Iglesia pobre como los es la paquistaní".
Además, agrega el sacerdote, "las iglesias deben pagarse ellas mismas los servicios de seguridad. Muchísimos cristianos abandonaron el país en busca de asilo político. El gobierno sostiene que la situación es pacífica y que está protegiendo a los cristianos: si así fuese, no tendríamos que defendernos solos. El ataque de Lahore demuestra que las declaraciones del gobierno son falsas".
Según Suneel Malik, director de la Fundación Phd, "los gobiernos provinciales y federales deben instituir una policía especial con formación profesional, en grado de proteger los asentamientos y los lugares de culto de los no musulmanes de los terroristas y de los ataques".
