Ataque a una Iglesia Ortodoxa Copta del Cairo. Entre las víctimas está una niña de ocho años
El Cairo (AsiaNews) - El saldo es de es cuatro muertos y 18 heridos en el ataque a la Iglesia Ortodoxa Copta de la Virgen María que se produjo el ayer por la tarde durante la celebración de un matrimonio en el distrito de Warraq en El Cairo. Entre las víctimas estaba una niña de ocho años. Este es el primer ataque deliberado contra una iglesia en la capital desde el 3 de julio, el día de la caída de la Presidente islamista Mohamed Morsi.
En una entrevista con Asianews, el padre Rafic Greiche, portavoz de la Iglesia católica egipcia, explicó que "dos hombres a bordo de una motocicleta se acercaron a la entrada del edificio y uno de ellos abrió fuego con una ametralladora a la multitud reunida frente al patio donde esperaban dar la bienvenida a los dos recién casados". El sacerdote señala que la cifra de muertos podría elevarse en las próximas horas, "los atacantes dispararon a unos pocos pies de distancia. Todos los heridos están en estado grave".
Por el momento nadie ha reivindicado el ataque, pero hay sospechas sobre algunos grupos terroristas cerca del ala más violenta de la Hermandad Musulmana. Unos minutos antes del tiroteo, algunos líderes islamistas, encarcelados en mayo de este año por incitación a la violencia, han publicado un mensaje en twitter con amenazas de ataques.
El padre Rafic Greiche dijo que desde julio, cada semana que los islamistas organizan manifestaciones y sentadas, las protestas en El Cairo y otras ciudades del país, a menudo se vuelven violentas. "Los cristianos-agrega-son el principal objetivo de estas acciones por el odio religioso".
Tras la caída del Presidente Morsi y la subida al poder del gobierno de transición del General Al Sisi, la minoría cristiana ha sido víctima de constantes ataques por grupos islamistas y afiliados a la Hermandad Musulmana. Los casos más graves se han producido entre el 14 y 17 de agosto, cuando miles de extremistas islámicos han atacado en todo el país 58 iglesias y doscientos edificios propiedad de la comunidad cristiana. En los meses siguientes, grupos de salafistas y miembros de Jamaa al-Islam se han escondido en algunas aldeas del Alto Egipto, imponiendo la ley islámica. Un ejemplo es el caso de Delga, pequeño pueblo en la provincia de Minya (Alto Egipto), que estuvo por más de dos semanas en manos de los extremistas islámicos. Durante su estancia confiscaron decenas de casas de la comunidad copta, obligando a más de 5.000 a huir, sangría detenida solamente por la intervención del ejército. (S.C.)
