Assad refuerza el poder con las elecciones. La oposición: Una farsa
Damasco (AsiaNews/Agencias)- La población siria mañana va avotar para las elecciones presidenciales, donde es prácticamente segura la victoria de Bashar Assad. La oposición clasifica las elecciones como una "farsa" ye invita a boicotearlas.
Ayer el partido Baath en el poder e hace más de 50 años en el País, exhortó a la gente a que vaya a votar por Assad. Bashar es presidente de Siria desde el 2000, después de la muerte de su padre Hafez. Después de algunos tímidos tentativos de reformas políticas emanadas en el primer año, Assad volvió al estilo dictatorial que había caracterizado a su padre. La primavera árabe de hace 3 años y las primeras revueltas los obligaron a hacer algunas reformas constitucionales y abrirse al multipartidismo. Estas elecciones son el aparente obsequio a las nuevas reformas. Mientras tanto, las manifestaciones de la primavera árabe se convirtieron en una guerra civil y regional, que han dejado al menos 160 mil muertos y millones de evacuados o refugiados.
Por esto la oposición acusa a Assad de querer "elecciones de sangre2 y pide que se las boicotee contra esta "farsa" o "parodia", dado que están excluidos los candidatos de la oposición. De hecho están excluidos los candidatos sirios provenientes del extranjero (en práctica, todos los exilados políticos).
Además de Assad para las elecciones se presentaron otros 2 candidatos: el parlamentario Maher al-Hajjar y el hombre de negocios Hassan al-Nouri, pero no tienen sin duda la fuerza para competir contra Assad.
Para el Baath, Assad es la persona que hay que elegir porque sabe "estar frente a la guerra y.... permanece al lado de su pueblo en cada ángulo del País".
En realidad, no todos "los ángulos del País" podrán votar: las elecciones se realizan durante la guerra y en algunas zonas, como por ejemplo Aleppo, el sur de damasco, Raqa, las regiones al norte y al este no podrán votar porque están en manos de la oposición.
Los estudiosos calculan que el voto se podrá realizar en el 40% del territorio sirio, donde vive el 60% de la población.
Siria ha tratado de hacer votar a muchos en el extranjero. Esto sucedió en Líbano y Jordania, con un bajo porcentaje respecto al número total de prófugos (200 mil sobre 2 millones), pero no fue posible en otros Países árabes, en Turquía en Bélgica, Francia, Alemania que apoyan a la oposición, se declararon a favor de ella y por el boicot de estas elecciones.
Para dar una imagen democrática, desde mañana representantes de 7 países contrlarán las operaciones de voto. Entre éstos están los aliados de damasco, Irán y Rusia, junto a Líbano, Uganda, Zimbawe, Bolivia, Venezuela, Tagikistán y Filipinas.
Si bien con todos los límites, los observadores están convencidos que las elecciones darán un gran apoyo a Assad y a su política de destruir a la oposición con la guerra.
Por otra parte, la oposición se desliza siempre más en contraposiciones entre laicos e islamistas, llegó hasta desencadenar una guerra intestina entre los grupos islamistas más radicales, manchándose de violencias y crímenes atroces, como ejecuciones, persecuciones de cristianos, asesinatos de niños y ancianos.
02/11/2015