Arzobispo de Yakarta: como Jesús, muestren compasión por los pobres, débiles y marginados
Yakarta (AsiaNews)- El tema de la compasión, el compartir los sufrimientos con los otros, los pasajes del Evangelio dedicados a este tema y los reflejos en las otras culturas y en las otras religiones presentes en el país, como emerge de los relieves del templo budista de Borobudur. Son los temas que tocó el arzobispo de Yakarta y presidente de la Conferencia episcopal indonesia (KWI) mons. Ignatius Suharyo, en ocasión de la conferencia nacional de la Asociación mujeres católicas (WKRI), que se tuvo desde el 3 de octubre en el centro de la capital.
Los tres días de encuentro y confrontaciones sobre el tema tenía como objetivo el de reforzar el espíritu de las participantes y mejorar su capacidad de relación y de construcción al interior de la sociedad. En el evento de los días pasados han participado delegados provenientes de todo el país, entre las cuales la zonas remotas de Papua, las provincias de Sumatra y de Borneo.
Promotora de la iniciativa fue la WKRI, la más antigua e importante organización femenina católica del archipiélago indonesio (nacida en 1924), que reúne a más de noventa mil inscriptas en el territorio y es activa en temas sociales y derechos humanos. La asociación nació para defender los derechos de las obreras empleadas en la industria del tabaco, cuyas condiciones de trabajo eran pésimas y los salarios irrisorios.
Dirigiéndose a la asamblea, mons. Suharyo explicó que la compasión es parte de una antigua” sabiduría local, una peculiaridad de la fe cristiana “espléndidamente esculpida en el templo de Bodobudur”. Se trata de un edificio del VIII siglo, el más grande templo budista del mundo por sus dimensiones, patrimonio Unesco, situado en la regencia Yogyakarta (Java central). Entre los bajo relieves esculpidos está el de un anciano viajador, al cual algunos animales ofrecen la comida para alimentarse.
La compasión es un “concepto de fe” como emerge de algunos pasajes evangélicos (Lucas 6,36 y Mateo 5,48). Además, mirando a la compasión que Jesús probaba hacia los otros “es necesario tener en cuenta del clima político de la época, en la cual las injusticias e iniquidades eran praxis común” agrega el prelado. “Jesús no representaba a sí mismo como el Dios glorioso- concluyó el arzobispo de Yakarta-como imaginado por la sociedad hebrea. Él entabló amistad con las personas marginadas, mostrando su lado más misericordioso tratándolos como seres humanos”.
En Indonesia, nación musulmana más ´poblada del mundo, los católicos son una pequeña minoría compuesta por unos siete millones de personas, par al 3,6% de la población. En la arquidiócesis de Yakarta, los fieles alcanzan el 3,6% de la población. Ellos son una parte activa en la sociedad y contribuyen al desarrollo de la ocasión del devastador aluvión de enero de 2013.