Arzobispo de Singapur: Recen por el trabajo, signo de testimonio cristiano
Singapur (AsiaNews/Agencias)- El arzobispo de Singapur invita al personal dependiente de las parroquias, de las escuelas y de los institutos religiosos de la ciudad-Estado a reunirse y recitar la Liturgia de las Horas. Las laudes de la mañana, la oración del mediodía y las vísperas de la tarde. Son citas cotidianas en las cuales la comunidad puede y debe reunirse para dirigir sus propias intenciones a Dios. "Como bien saben-subrayó recientemente el prelado- la tarea más importante de la Iglesia universal es el compromiso en la Nueva Evangelización que presupone, ante todo, la conversión personal de cada católico, desde el Papa a los obispos, sacerdotes, religiosos y laicos".
En una carta enviada hace poco a la comunidad, mons. William Goh Seng Chye subrayó que el desafío primario es "la renovación de nuestra relación con el Señor". Él invita a los fieles a "encontrarlo en modo real y concreto" para que "podamos proclamar la alegría del Evangelio a aquellos que todavía no la conocen".
Junto al recitar de la Liturgia de las Horas, el arzobispo de Singapur invita a los dependientes de os institutos católicos a unirse al menos una vez por semana para estudiar la Biblia, además que a "pedir 5 días de vacaciones al año, para organizar un retiro espiritual".
En Singapur los católicos son más de 200 mil, casi el 5% del total de la población; entre las religiones, la más difundidas es el budismo con un 43%; siguen los cristianos con el 18% del total, el islam 15%, hinduismo y taoísmo con el 11 15%. La Iglesia local vive un momento de crecimiento y dinamismo, que han llevado a una apertura de un seminario teológico, definido como una verdadera "piedra miliar" para la comunidad local.
Más pequeña de Nueva York y sin recursos naturales, la ciudad-Estado registró en 2010 un Pib (producto interno bruto) de 285 billones de dólares de Singapur (unos 231 billones de dólares Usa), con un crecimiento del 14%, el dato más significativo de toda Asia. Sin embargo la riqueza no está distribuida en modo ecuo y el boom económico acentuó la disparidad entre los ciudadanos, con un crecimiento del coeficiente Gini- la medida de la desigualdad, ndr- que se coloca en 0,48 (en el 200 era de 0,444) en un metro de referencia entre 0 y 1 (desigualdad total).