Arzobispo de Moscú: Año Santo, impulso a la colaboración entre católicos y ortodoxos

de Marta Allevato

Mons. Paolo Pezzi cuenta a AsiaNews las ideas para reforzar la cooperación en el campo con la iglesia ortodoxa: desde las cárceles al trabajo con las familias y los minusválidos. Abierta la Puerta Santa también en el Polo Norte: “No hay una condición en la cual no vivamos que sea un impedimento para experimentar la misericordia”.

Moscú (AsiaNews)- El Año Santo como ocasión para dar impulso a la colaboración y a la comunicación entre católicos y ortodoxos “en el campo”, apoyando a la familia, a los pobres, a los encarcelados y a los minusválidos. Con este compromiso se dio inicio en Rusia el Jubileo de la Misericordia, así como lo cuenta a AsiaNews, mons. Paolo Pezzi arzobispo de la Madre de Dios en Moscú. También aquí el 13 de diciembre fue abierta por primera vez una Puerta Santa: se encuentra en la catedral de la Inmaculada Concepción, pero en el inmenso país se abrieron diversas Puertas: desde las capillas en las cárceles hasta el Polo Norte.

“Para ser precisos se encuentra en Murmansk- nos explica mons. Pezzi- es la parroquia más al norte y si bien no sé cuántos lograrán llegar hasta allá en peregrinación, he querido una Puerta Santa por el fuerte valor simbólico: no existe una condición en la cual vivamos en la cual no se pueda no experimentar la misericordia”. “Esto- agrega el arzobispo- es lo que quisiera comunicar a los fieles, mientras que el otro deseo es que este Año Santo de la misericordia es tener la posibilidad de tener tantas Puertas Santas puede ser una ocasión para tantos católicos el poder volver a la iglesia”.

Sólo en la arquidiócesis de la Madre de Dios hay 10, además de la de Moscú, hay también en las ciudades con relativas parroquias donde fueron abiertas Puertas Santas y donde los fieles rusos podrán concurrir en peregrinación. Entre éstas justamente la de Murmansk y la de santa Catalina en San Petersburgo, Perm, Vladimir, Orel, Tula, Kaliningrad y Chernogorsk.

“Justo en el día en el cual hemos abierto la Puerta Santa en Moscú- recuerda mons. Pezzi- me di cuenta en modo más profundo de la genialidad que tuvo el Papa en el querer crear Puertas Santas en todo el mundo: la misericordia es una experiencia que podemos hacer siempre, en cualquier lugar esté la Iglesia vivida en la experiencia de una comunidad cristiana, aunque pequeñísima, que vive reconociendo ser, como dice el Papa “misericordiada”, o sea ante todo amada”.

Puerta antas en todo el mundo no significa sólo en diversas ciudades, sino también en diversos lugares, como por ejemplo en las cárceles: “Tenemos dos capillas en dos cárceles, que tendrán esta función si bien no hemos hecho un anuncio público; en realidad una sola de estas capillas está en mi diócesis, en la región de Kalinigrad, donde estaré durante la Semana Santa” (la otra está en la diócesis de san Clemente en Saratov).

Justamente las cárceles son un ejemplo de colaboración entre sacerdotes ortodoxos y católicos ya en acto concretamente. “Pero hay otras iniciativas comunes que tenemos en proyecto con ellos en diversos sectores: ante todo, la familia”. La idea, anticipa el arzobispo es de hacer partir este año a “un grupo de trabajo mixto, con la idea de comunicarnos los testimonios y experiencias en acto para ayudar a la familia en cuanto tal, más que ponernos a hacer cosas teóricas o iniciativas que se suman a otras iniciativas”. Se trata de una idea de la arquidiócesis ya propuesta a los referentes al Patriarcado de Moscú y ahora en fase de desarrollo.

Otro proyecto “aún en el papel” es la de organizar iniciativas para las personas más necesitadas y pobres “para ayudar a la sociedad y también a la opinión pública a no eludir preguntas y problemas humanos, a hacer como que no existieran, como sucede por ejemplo con los minusválidos hacia los cuales existe aún un fuerte prejuicio debido a la vergüenza”. “La idea es de una mesa de trabajo mixto permanente que tendrá durante el año formas más públicas, otra de la hipótesis es que se vaya a las parroquias católicas y ortodoxas a contar estos testimonios e involucrar a los fieles en este tipo de actividades”.

La arquidiócesis Madre de Dios tiene en programa dos peregrinaciones en este Año Santo a Roma, en abril y septiembre. “Se trata por tradición de un acto de penitencia y de acogida de la Misericordia de Dios”, explica mons. Pezzi, contando que están examinando también la posibilidad de una peregrinación a Tierra Santa en otoño, pero que depende de la situación”. La iglesia católica rusa pensó “intensificar las peregrinaciones locales a las iglesias donde fueron abiertas las Puertas Santas de la Misericordia”. “Ya el 13 de diciembre, aquí en Moscú, se invitó a ir en peregrinación a la misa y fue una experiencia conmovedora- recuerda el arzobispo- muchos sin necesidad de organizarse en grupos sino en manera espontánea, quien con el metro, quien de su propia casa, han hecho hasta 15-20 quilómetros para llegar a la catedral”.

También la Misericordia fue el centro de la homilía de mons. Pezzi para el día de Navidad. “La experiencia de la Misericordia es una experiencia al alcance de todos y la navidad nos dice esto: Dios se hizo hombre por la misericordia de dios, que es el corazón de Dios y la experiencia más bella; es la posibilidad de reiniciar siempre, no hay jamás nada por lo cual yo sea anticipadamente condenado, puedo siempre recomenzar, esto está al alcance de todos, no es sólo para algunos y la Navidad nos dice esto”.