Ankara, economía y diplomacia: la «nueva era» de las relaciones entre Erdogan y al-Sisi
El presidente egipcio recibido por su homólogo turco con el objetivo de archivar una década de divisiones, empezando por el enfrentamiento en torno a los Hermanos Musulmanes. Se firmaron 17 acuerdos de cooperación entre dos países que, en realidad, nunca habían roto lazos. El «realineamiento» también se vio favorecido por una visión común sobre Gaza.
Ankara (AsiaNews) - La primera visita del presidente egipcio Abdel Fattah al-Sisi a Ankara, recibido ayer con todos los honores por su homólogo turco Recep Tayyip Erdogan después de años de tensiones y divisiones, concluyó con la firma de 17 acuerdos de cooperación. El encuentro entre los dos líderes del mundo musulmán y de la región Mena (Norte de África y Medio Oriente) parece haber archivado así una década de distanciamiento, abriendo una nueva era en las relaciones -sobre todo institucionales- entre Egipto y Turquía. Al mismo tiempo, confirma un vínculo económico y comercial que, incluso durante la última fase de tensión y hostilidad, nunca se había roto del todo.
Una amplia delegación acompañó a al-Sisi, que acudió a Ankara para una visita de un día después de que ambos jefes de Estado mantuvieran el pasado febrero en El Cairo su primera reunión oficial tras años de escarcha. «Mi primera visita a este país amigo es un indicio de que las relaciones entre los dos países seguirán desarrollándose», declaró el presidente egipcio a los periodistas durante una rueda de prensa conjunta al término de tres horas de conversaciones entre los mandatarios y las delegaciones.
Ankara y El Cairo habían roto relaciones en 2013 después de que el presidente al-Sisi, entonces ministro de Defensa, derrocara al presidente Mohamed Morsi, aliado de Turquía y miembro del movimiento de los Hermanos Musulmanes. En aquel momento, Erdogan dijo que nunca hablaría con «nadie» como al-Sisi, que un año después se convirtió en presidente de la nación más poblada del mundo árabe. La fase de profundas tensiones y divisiones ha continuado, pero en los dos últimos años las relaciones se han recuperado gracias al «realineamiento» en varios asuntos importantes, sin olvidar la guerra de Gaza entre Israel y Hamás, sobre la que existe una opinión común. Además, a pesar de un cierto distanciamiento entre los dirigentes en el pasado, los intercambios comerciales entre Egipto y Turquía no han cesado en la última década, hasta el punto de que Ankara es el quinto socio comercial de Egipto, mientras que Egipto es el primer socio de Turquía en África.
Volviendo a la reunión de ayer, los dos países firmaron acuerdos para profundizar su cooperación en diversos temas, desde la energía hasta la cultura. «Mi visita a El Cairo marcó un nuevo punto de inflexión en nuestras relaciones», declaró Erdogan. «Con el regreso hoy de la visita de mi querido hermano [al-Sisi]», añadió el dirigente turco, “avanzamos aún más en nuestras relaciones”. Este lenguaje representa sin duda un punto de inflexión para Erdogan, que había jurado en 2013 que nunca le daría la mano por la expulsión de los Hermanos Musulmanes. Con el tiempo, sin embargo, han prevalecido las razones económicas y de oportunidad, que han llevado a los dos líderes del mundo musulmán a estrechar relaciones también en el plano político y diplomático. Un cambio de rumbo que ha acercado a Ankara no sólo a Egipto, sino también a Arabia Saudí y a los Emiratos Árabes Unidos (EAU).
Aprovechando su situación estratégica, Turquía busca participar en proyectos energéticos regionales clave que pretenden transportar el gas natural egipcio a Europa, en el contexto de los esfuerzos occidentales por disminuir su dependencia de Rusia. «Estamos deseosos de reforzar nuestra cooperación energética con Egipto, especialmente en materia de gas natural y energía nuclear», declaró Erdogan. El dirigente turco reiteró asimismo el objetivo de aumentar el volumen de los intercambios comerciales entre ambos países hasta 15.000 millones de dólares desde los 10.000 millones actuales, en un momento en que la inversión extranjera directa de empresas turcas en Egipto ha aumentado hasta 3.000 millones de dólares en el último año.
Por último, los dos dirigentes firmaron una declaración conjunta en la que reiteran su voluntad de aumentar la coordinación en una serie de asuntos regionales como Gaza, Libia y el Cuerno de África. Estos son signos de una reducción gradual de las diferencias en los distintos expedientes de política exterior entre Ankara y El Cairo, especialmente en el conflicto libio, donde las dos capitales han apoyado a grupos rivales en la guerra civil. «Debemos trabajar juntos, especialmente a la hora de abordar cuestiones regionales, para prevenir crisis humanitarias», dijo Sisi. Además, en un intento de allanar el camino para recomponer las relaciones en la región, Ankara ha abandonado las políticas de apoyo abierto y manifiesto a los Hermanos Musulmanes, calificados de organización terrorista por El Cairo y varias capitales del Golfo.
17/12/2016 13:14
12/04/2016 11:23