Amnesty International: en 2017, en la India hubo constantes violaciones de los derechos humanos

de Nirmala Carvalho

Se difundió el informe anual sobre el “Estado de derechos humanos en el mundo”. En la India, las autoridades fueron abiertamente criticadas en relación con los defensores de los derechos humanos. Se regsitró una intensificación de la violencias en masa, que incluye los episodios llevados a cabo por los grupos de los vigilantes de las vacas.

Bombay (AsiaNews)- En el año 2017 hubo un contante abuso de los derechos humanos en la India. Lo revela el informe de Amnesty International sobre el “Estado de los derechos humanos en el mundo 2017-2018”, difundido el 22 de febrero pasado. En lo que se refiere al subcontinente indio, la organización denuncia decenas de episodios de violencia contra las minorías religiosas y en particular contra los musulmanes, que sufren una creciente demonización por parte de los grupos nacionalistas radicales hindúes. Luego habla de las comunidades adivasi (grupos indígenas tribales, ndr) que “continúan siendo evacuados a causa de proyectos industriales”, y de los crímenes de odio contra los dalit, que siguen propagándose. A AsiaNews, Sajan K George, presidente del Global Council of Indian Christians (Gcic), afirma: “El GCIC documenta desde hace décenios los ataques contra los cristianos. El año pasado, no sólo hemos (registrado) los ataques, sino también el aumento del miedo a represalias entre los miembros de la vulnerable comunidad cristiana”.

En su informe anual, el grupo de activistas evidencia que “en la India, las autoridades fueron abiertamente críticas contra los defensores de los derechos humanos, contribuyendo a crear un clima de hostilidad y violencia contra ellos”. Se intensificaron las violencias en masa, comprendidas aquellas realizadas por grupos de vigilantes de las vacas (radicales hindúes que se autoproclaman defensores absolutos del animal sagrado para el hinduismo y agreden a todos aquellos que están involucrados en la matanza del ganado- ndr).

Según Amnesty International, la libertad de prensa y de palabra en las universidades fue atacada. India “fracasó en el respeto a sus compromisos en relación a los derechos humanos tomados ante del Consejo de las Naciones Unidas por los derechos humanos”. La ONG evidencia que las estadísticas difundidas en noviembre citan más de 40.000 crímenes contra las castas desventajadas en 2016. “Se dieron varios incidentes -reporta- en los cuales las castas dominantes atacaron a los dalit por el acceso a los espacios públicos y sociales o por presuntas transgresiones de casta”. Los activistas refieren, además, que al menos 90 dalit que se desempeñaban como recolectores manuales de basura murieron en un año mientras limpiaban las cloacas, a pesar de dicha práctica haya sido prohibida. “Muchos de los que fueron asesinados -denuncian- estaban empleados ilegalmente por agencias del gobierno”.

Sajan K George confirma que “los más afectados son justamente los tribales y los dalit indigentes. Hace 3 días, un tribal de 27 años fue golpeado a muerte por el presunto robo de un poco de arroz en un negocio de Kerala. La multitud lo ató, le pegó y se sacó selfies junto a él. Pareciera que la conciencia de las personas está ofuscada”. El desahogo de crímenes de odio -agrega- y los incidentes de violencia sectaria ofrecen una imagen vergonzosa de pérdida de humanidad. Además, los abusos contra las mujeres y los niños en todo el país dan una imagen ofuscada del estado del hombre común”. “La cultura de la mayoría -concluye el líder cristiano- domina en la India y es visible en cada esfera del tejido social”.