Amenazas de muerte a comerciantes cristianos e hindúes

de Sumon Corraya

Las misivas de muerte son de un grupo islámico prohibido. Exigen a los propietarios de las tiendas que respeten ocho normas bien precisas. Entre ellas, se incluyen tener una copia del Corán, servir carne de vaca en los restaurantes hindúes, no permitir trabajar a las mujeres y eliminar las imágenes sagradas cristianas.

Dacca (AsiaNews) - Los cristianos e hindúes propietarios de tiendas, restaurantes, hoteles y otros negocios se arriesgan a morir si no cumplen con una lista de ocho reglas islámicas. Las amenazas de muerte, contenidas en una suerte de instructivo, fueron entregadas a los comerciantes por miembros del Islamic Khalafot Mojahidin Bangladesh (IKMB), un grupo islamista prohibido en Bangladesh. Después de esta intimidación y el atentado de la semana pasada en el café de Dacca, ahora los comerciantes no musulmanes viven con miedo, pero no tienen intenciones de rendirse. Albert Prodip Baperi, un católico que administra el restaurante de comida china-tailandesa Yean Tun, dijo a AsiaNews: "Morire, pero no voy a aplicar las directrices de los militantes".

El católico cuenta: "Un desconocido entregó este volante y luego se alejó de nuestro mostrador, corriendo. Hemos informado del incidente a la comisaría de policía local".

La carta fue entregada hace unos meses en su restaurante, que también organiza bodas y fiestas de cumpleaños, con algunos hoteles de cinco estrellas y otras tiendas administradas por personal no musulmán. Desde ese momento las tiendas cuentan con altas medidas de seguridad y se han contratado guardias de seguridad privada.

Las instrucciones son precisas. En los establecimientos comerciales se deben cumplir ocho reglas: a la entrada, debe estar escrito "Bismillah Rahman Rahim" [la invocación "En el nombre de Allah, el Clemente, el Misericordioso" con la que se abren todas las suras del Corán, ndr]; tener una copia del Corán; tener una imagen de la Kaba Sharif [el edificio cúbico en el centro de la mezquita de la Meca, considerado el lugar más sagrado del Islam - ndr]; la eliminación de pinturas o estatuas sagrados de la religión propia; ubicar un lugar donde los clientes musulmanes puedan orar; no servir alimentos haram (prohibido) como el cerdo, y si los clientes musulmanes han pedido carne de vaca en un restaurante hindú [considerada sagrada por el hinduismo], deben ser satisfechos; cerrar el restaurante durante el mes de Ramadán; no tocar ningún tipo de música, excepto canciones islámicas; prohibir el trabajo a las mujeres, si no pueden evitarlo, ordenarles que lleven el hijab [velo] o el bhurka [el vestido que cubre de la cabeza a los pies, dejando sólo los ojos al descubierto].

La pena para quien contravenga estas directrices es una sola: la muerte a manos de militantes del IKMB. El restaurantero católico refiere: "En nuestro restaurante hay imágenes de Jesús y María, y van a permanecer donde están".

Incluso la Christian Co-Operative Credit Union Ltd, la mayor cooperativa de microcrédito en Bangladesh, dirigida por católicos, ha recibido amenazas. Hemento Corraya, el secretario, dice: "Hemos sido objeto de las mismas amenazas. Por eso, en nuestras oficinas hemos elevado la alerta. Es muy triste que los fundamentalistas islámicos traten de controlarnos por la fuerza. Pedimos ayuda a la policía, para garantizar nuestra seguridad".