Aluviones en el Estado de Kayah: al menos 17 muertos y decenas de familias evacuadas
Yangon (AsiaNews/Agencias) - Es al menos de 17 muertos el saldo, todavía provisorio, de un deslizamiento provocado por lluvias torrenciales en el Estado oriental de Kayah, en Myanmar, que causó además la evacuación de decenas de familias de las zonas más afectadas. De acuerdo a los medios birmanos oficiales, la avalancha de tierra habría embestido, ayer por la tarde, a una aldea del pueblo de Hpa-saung, en un área remota, que torna difíciles los contactos y las comunicaciones con la población. Es por esta razón que, con toda probabilidad, el número de víctimas está destinado a incrementarse en las próximas horas.
El periódico estatal Global New Light of Myanmar refiere que las víctimas fatales son 10 hombres y 7 mujeres. Más de 360 personas han sido llevadas a centros de acogimiento temporarios que han sido establecidos dentro de escuelas, así como en un hospital de la zona.
Fuentes locales afirman que fueron destruidas al menos 60 casas, esparcidas en un área donde el terreno es elevado, entre las aldeas de Mawchi Taung Paw y Lokhalo; el terreno cedió, arrastrando consigo a las viviendas. Los expertos prevén más lluvias, que podrían complicar aún más el cuadro, ya de por sí crítico, en la región.
Mientras tanto, han comenzado a escasear la comida, el alojamiento y la vestimenta, en su mayoría perdidos durante los aludes. Mawchi supo ser un importante centro de explotación minera del estaño y del tungsteno, al punto de convertirse en fuente primaria mundial en 1930, durante el dominio británico. En el pasado, activistas y grupos en defensa del ambiente han hecho llamamientos para terminar con el trabajo de extracción de estos minerales, por ser fuente de "desastres ambientales", no obstante no se han establecido vínculos ciertos entre la actividad minera y los aluviones de ayer.
En julio pasado, Myanmar ya había sido escenario de trágicos aluviones -los peores de los últimos años, según varios expertos - que causaron numerosos muertos y afectaron a por lo menos 1,6 millones de habitantes en todo el país. Por otro lado, las lluvias monzónicas anuales son esenciales para el sector agrícola, pero pueden tornarse (en algunos casos) mortales a causa de los deslizamientos, desmoronamientos, inundaciones. La Iglesia católica birmana y Caritas nacional (KMSS) han salido al campo y están en primera fila en la tarea de socorrer a los afectados, distribuyendo agua potable, alimentos, elementos de primera necesidad, utensilios y alojamiento temporario para más de 120.000 personas.