Aislamiento y progreso: los nizaríes de Hunza, entre el Islam, los negocios y la modernidad
Es una comunidad de aproximadamente 50.000 personas que habitan el valle ubicado en el extremo noreste de Pakistán. Si bien acentúan el componente esotérico de la religión musulmana, se han mantenido en gran medida inmunes a las presiones y amenazas de la mayoría sunita. Está encabezada por Karim, el cuarto Aga Khan, reconocido como el 49º imán por los 15 millones de ismaelitas.
Milán (AsiaNews) - En Pakistán hay una comunidad que ha sabido aprovechar sus características de cohesión y aislamiento, pero también la voluntad de sus líderes de abrirla al mundo y al progreso, lo que la ha llevado a ser un verdadero ejemplo, aunque a menudo desconocido.
Los nizaríes habitan el valle de Hunza, en la zona de Gilgit-Baltistán, situada en el extremo nororiental de Pakistán sobre la cadena del Hindu Kush. Es una región marcada por las altas montañas, pero también por el encanto de sus bosques, sus cursos de agua y sus lagos. En otros tiempos quedaba aislada durante varios meses al año, pero ahora es más accesible y, sobre todo, más abierta al resto del país gracias a los limitados servicios aéreos y las modernas carreteras, entre ellas la Karakorum Highway, que la atraviesa siguiendo las huellas de la antigua ruta de las caravanas y de peregrinación budista que asciende hacia la frontera china.
El aislamiento geográfico la habría convertido en una de las tantas zonas condenadas a una vida difícil, al turismo de élite o a las expediciones de alpinismo si no hubiera sido por una coincidencia de factores.
Hunza es en realidad heredero de un pequeño principado que, tras convivir con el poder británico, después de la independencia optó por cohabitar en la nueva nación pakistaní conservando su identidad y sus características, que han tenido proyección nacional e internacional gracias a sus Aga Khan, líderes religiosos y políticos.
Aga Khan es un título reconocido a la dinastía local, que en el momento de la independencia estaba representada por el tercer Aga Khan, Mohammad Jamal Khan, quien supo dirigir su pequeña comunidad (hoy hablamos de unas 50 mil personas) ofreciéndole la posibilidad de aplicar su empuje y sus capacidades mucho más allá de sus fronteras originales. Estas posibilidades se vieron favorecidas por la estrecha solidaridad e interdependencia que la caracterizan. El mismo "camino" continuó su nieto, el príncipe Karim Aga Khan, que le sucedió a los veinte años en 1957, conocido por su capacidad de gestión y su olfato financiero, pero también por su participación en el jet-set internacional y las enormes inversiones que realizó gracias a las donaciones de sus partidarios. Promovió, entre otras cosas, el desarrollo turístico de la Costa Esmeralda, en Cerdeña (Italia).
Hoy los ismaelitas de Hunza son conductores, guías turísticos, empresarios, ejecutivos, políticos y magistrados. Cooperan con las instituciones que ha puesto en marcha o dirige el Aga Khan (la mayoría de las veces desde el exterior, donde reside habitualmente) para el desarrollo del valle, pero también con actividades -escuelas, hospitales, actividades sociales, infraestructuras- que la población comparte sin exclusiones. La participación y la iniciativa, pero no la exclusión, que caracterizan a esta población la convierten en una realidad muy particular, a lo que se suma la adhesión a una comunidad religiosa de tradición islámica - los ismaelitas - que se remonta a la división histórica entre sunitas y chiítas en el siglo VII y una subdivisión posterior de estos últimos en el siglo VIII.
La comunidad que se conoce como nizaríes acentúa el componente místico y esotérico del Islam y por esa razón a menudo es considerada heterodoxa, si no herética, por otras comunidades musulmanas. Karim, el cuarto Aga Khan, es reconocido como el 49º imán por los 15 millones de ismaelitas que se calcula que hay en el mundo, pero, caso raro, la presión de la mayoría sunita, que en otras regiones se manifiesta incluso con discriminaciones y actos violentos, la mayoría de las veces pasa por alto la realidad de los nizaríes de Hunza.
(Foto tomada de la página de Facebook del Aga Khan IV)
17/12/2016 13:14
15/05/2015