Aden, kamikaze del Estado islámico atenta contra los reclutas del ejército: 71 muertos y 98 heridos

El ataque yihadista atacó un centro de adiestramiento para los nuevos soldados. Las autoridades hablan de “masacre” con “el más alto número de víctimas” jamás registrado. Analistas y expertos subrayan que el atentado demuestra las dificultades del gobierno en restablecer la seguridad. Gobierno y rebeldes prontos a una nueva iniciativa de paz.

Sana´a (AsiaNews/Agencias)- Es al menos de 71 muertos y 98 heridos el balance actualizado de un atentado suicida sucedido ayer en Aden, en el sur de Yemen, por parte de las milicias del Estado islámico (EI) activas en el país. Objetivo del atentado eran los jóvenes reclutas del ejército regular, que combate ya sea contra los rebeldes Houthi que contra los movimientos extremistas islámicos, entre los cuales Daesh (acrónimo árabe para el EI) presentes en el territorio.

El ataque de ayer tomó de mira a un centro de adiestramiento en la zona septentrional de Aden. El kamikaze, a bordo de un camión lleno de explosivos, dirigió el mismo medio contra un grupo de nuevas reclutas presentes en aquel momento en el campo, en espera de recibir el desayuno de la mañana.

A la tarde los líderes del Ei han reivindicado el ataque a Aden, capital “provisoria” de Yemen, en la porción de territorio controlada por los gubernamentales; las autoridades yemenitas hablan de “masacre”, con “el más alto número de víctimas jamás verificada antes en la ciudad”.

Testimonios narran que la explosión fue tan fuerte “que provocó el derrumbe del techo de una aula”, que cayó encima “de los numerosos reclutas” presentes en el momento en la zona.

En los últimos dos meses los vértices gubernamentales han reclutado y adiestrado centenares de soldados en Aden, en el contexto de una campaña lanzada para reconquistar las provincias meridionales en manos de los yihadistas. Sin embargo, analistas y expertos subrayan que el ataque las dificultades encontradas por las autoridades en el tratar de restablecer la seguridad en la zona.

Mientras tanto, gobierno y rebeldes han respondido en modo positivo a una nueva iniciativa de paz, lanzada por los países del Golfo para poner la palabra fin al conflicto. El objetivo es la retirada de los rebeldes Houthi de la capital Sana´a y la formación de un gobierno de unidad nacional. Los rebeldes han abierto la posibilidad para los coloquios, a condición que la coalición guiada por los sauditas frene los ataques y el asedio a los territorios bajo su control.

Desde enero de 2015, la nación del Golfo es teatro de un sangriento conflicto interno que ve opuestos a la dirigencia sunita, apoyada por Riad y los rebeldes chiíes Houthi, cercanos a Irán. En el mes de marzo, los sauditas a la cabeza de una coalición han lanzado ataques aéreos contra los rebeldes en el intento de liberar la capital Sana´a y entregar el país al presidente (antes en exilio y que luego volvió) Abdu Rabu Mansour Hadi.

En los bombardeos- terminados en la mira de las naciones Unidas por las víctimas civiles, también niños - murieron unas 6.600 personas. Al menos 2,5 millones de evacuados del conflicto.

Para Arabia Saudita los Houthi, aliados de las fuerzas fieles al ex presidente Ali Abdullah Saleh, son apoyados en el plano militar por Irán; una acusación que Teherán rechaza. En el país además están activos grupos extremistas ligadas a al-Qaeda y milicias yihadistas, ligadas al Estado islámico, que han contribuido a aumentar el espiral de violencia y terror.