Activistas y políticos piden a Kuala Lumpur: más allá de la moratoria, abolir la pena de muerte
En su último informe anual, Amnesty International pide mayores esfuerzos para abolir la pena de muerte. Malasia ha avanzado, especialmente con la moratoria que está vigente desde 2018, pero no es suficiente: entre julio de 2023 y enero de 2024, 26 casos concluyeron con la aplicación de la pena de muerte. Michael Kong, abogado: "Debe haber un mayor debate público sobre la justicia".
Kuala Lumpur (AsiaNews)- En el último informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el país que publicó hace dos días, Amnesty International Malaysia pide una vez más la abolición definitiva de la pena de muerte. A pesar de la evolución positiva registrada en 2023 como consecuencia de la moratoria de las ejecuciones que está vigente desde 2018 y de la ley que aprobó el 3 de abril de 2023 la Cámara de Representantes sobre la eliminación de la pena de muerte para 12 delitos - entre ellos los relacionados con drogas -, Amnesty considera que no es suficiente, y que el país debe garantizar que los procedimientos judiciales respeten el derecho a un juicio justo, con tiempo y recursos adecuados a las condiciones de la persona acusada.
En efecto, la moratoria es una medida no definitiva y podría revocarse en cualquier momento. Aunque la última ejecución en la horca fue en 2017, la ONG internacional vuelve a insistir en su posición inamovible. “Amnesty International se opone incondicionalmente a la pena de muerte, en todos los casos y en cualquier circunstancia, porque constituye una violación del derecho a la vida y, en última instancia, un castigo cruel, inhumano y degradante”, declaró la directora ejecutiva Katrina Jorene Maliamauv durante la presentación del reporte anual. Pidió que se extienda la moratoria hasta la completa abolición de la pena de muerte y la conmutación de todas las condenas a muerte, en línea con la Abolition of Mandatory Death Penalty Act 2023, que entró en vigor el 4 de julio de 2023, y la Revision of Sentence of Death and Imprisonment for Natural Life (Temporary Jurisdiction of the Federal Court) Act 2023, que entró en vigor el 12 de septiembre de 2023, que “permitieron a un total de 1.020 presos condenados a la pena de muerte obligatoria o a cadena perpetua solicitar a los tribunales la revisión de la sentencia”, dice el informe.
A pesar de estos cambios legislativos, Amnesty International ha examinado las decisiones judiciales que involucraban a 139 personas entre el 4 de julio de 2023 y el 4 de enero de 2024, y constató que había 26 casos (27%) que concluyeron con la pena de muerte. El informe encontró que 18 de estos casos (69%) estaban relacionados con homicidios, mientras que los ocho restantes (31%) eran por delitos de drogas. “Si bien es loable que el país haya avanzado hacia la abolición de la pena de muerte obligatoria, las palabras deben ir seguidas de hechos concretos”, dijo Maliamauv, y explicó que los esfuerzos para defender los derechos humanos deben continuar más allá de este punto, sin dejar de tener en cuenta también la oposición a la abolición total de la pena de muerte que apoyan sobre todo los familiares de las víctimas de homicidio. La directora espera que aumenten los debates públicos abiertos sobre la justicia y las alternativas a ese castigo.
Dos abogados y políticos que hablaron con AsiaNews coinciden con el planteo de Amnesty International. "Soy consciente de los pros y los contras de abolir la pena de muerte. Una razón que me parece muy fuerte a favor de la abolición es el hecho de que la pena de muerte es irreversible e irreparable, a diferencia del encarcelamiento", declaró Baru Bian, diputado por el Estado de Sarawak, y propone la solución de la cadena perpetua. “La alternativa debe ser una condena por el resto de la vida natural del condenado”, añadió.
Michael Kong, del opositor Democratic Action Party, elogió los pasos que está dando Malasia hacia la abolición total de la pena de muerte y señaló la importancia de ampliar la moratoria. "En algunos delitos que aún conllevan la pena de muerte, es esencial garantizar que no se apliquen medidas irreversibles hasta que se adopte una decisión concreta y definitiva sobre el problema", afirmó. Kong, al igual que Katrina Jorene Maliamauv, también subraya la importancia de que el tema entre en el debate público. “La atención debe seguir centrándose en la defensa de los derechos humanos y la exploración de alternativas a la pena de muerte mediante debates públicos y abiertos sobre la justicia”.
31/03/2021 11:01