Activistas contra la pena de muerte en Pakistán: 425 personas ahorcadas en menos de dos años (VIDEO)
Ayer se celebró la Jornada mundial contra la pena de muerte. Más de veinte defensores de los derechos humanos han manifestado en forma pacífica delante del Lahore Press Club. Ellos denuncian que las condiciones de las cárceles son desastrosas y que los condenados son ahorcados aunque hayan cometido un crimen cuando aún eran menores.
Lahore (AsiaNews)- A distancia de casi dos años desde cuando el gobierno de Islamabad reintrodujo la pena de muerte para los delitos ligados con el terrorismo, y que después la aplicó también para todos los otros delitos, las ejecuciones por ahorcamiento fueron 425. Es cuanto han denunciado ayer más de veinte activistas paquistaníes, que se reunieron en forma pacífica frente la Lahore Press Club para manifestar contra las ejecuciones capitales. Tal práctica, afirman, ha colocado a Pakistán en el tercer puesto en la clasificación mundial de los países que practican más la pena de muerte, después de China e Irán.
Ayer se celebró la Jornada mundial contra la pena de muerte. Después de haber decretado la moratoria sobre las ejecuciones capitales, el gobierno revocó la decisión después del atentado realizado por los talibanes contra la escuela militar de Peshawar, que provocó la muerte de casi 150 entre estudiantes y docentes.
Mientras la población está dividida sobre el tema, los activistas no tienen dudas al respecto. I. A. Rehman, secretario general de la Human Rights Commision of Pakistan (HRCP) declara a AsiaNews: “Las ejecuciones disminuyen la posibilidad para el encarcelado de poder probar su inocencia; las formas de corrección deben prevalecer sobre los castigos extremos. A menudo son ahorcados también los enfermos mentales o aquellos que eran menores cuando cometieron los crímenes”. “El islam enseña la misericordia”, recuerda.
Los activistas subrayan que durante su investigación conducida entre el 2013 y 2014, han encontrado que en las cárceles faltan diversas estructuras destinadas a los prisioneros, en particular para aquellos que se encuentran en el brazo de la muerte
Rehman reporta que “el más ´problema en las celdas de la muerte es la falta de espacio. Una habitación de poco más de tres metros cuadrados deberían hospedar a un solo detenido, mientras que están llenas con ocho o nueve personas. No hay separación con el baño y las sábanas son usadas para tapar la zona de los grifos donde se lavan ellos mismos o los utensilios de cocina. Ellos no son tratados como seres humanos”.
El p. Abid Habid, ex -presidente del Major Superiors Leadership Conference of Pakistan, pide con fuerza una reforma de las cárceles. Él por siete años realizó visitas a las casas carcelarias presentes en las arquidiócesis de Lahore y Karachi. “Es realmente difícil rezar con los prisioneros. En particular los condenados no tienen permiso para poder participar en los momentos de oración, por lo tanto yo tenía que celebrar misas separadas en cada celda”. “Se lamentan de la comida-concluye- y del revestimiento externo en ladrillos. Por más que fregaran, no se limpiaba nunca y provocaba una fuerte picazón”.
25/07/2022 11:52
24/02/2016 16:31