Abierta la causa de beatificación de Darwin Ramos, 'niño de la calle'
Nacido en 1994, el niño de la calle descubre la fe católica en 2006. El siervo de Dios murió a los 17 años a causa de una distrofia muscular de Duchenne, se convirtió en su “misión”. El obispo de Cubao: “Era conocido por ser un hombre y santo”. El postulador de la causa: “Su vida espiritual fue realmente impresionante”.
Manila (AsiaNews/Agencias) – Se inició en la diócesis de Cubao (sufragánea de Manila) la causa de beatificación del “Siervo de Dios” Darwin Ramos (Foto), niño de la calle filipino muerto en el año 2012 a causa de una grave enfermedad degenerativa. El anuncio oficial del inicio del proceso tuvo lugar ayer, durante una solemne función eucarística (Video 1) en la catedral de la Inmaculada Concepción. Antes de la celebración, la diócesis había organizado una conferencia de prensa (Video 2) en la cual estaba presente también la madre de Erwin, Erlinda Ramos.
Durante la misa. Mons. Honesto Flores Ongtioco, obispo de Cubao, declaró que el joven “era conocido por ser un hombre simple y santo”. “El entero proceso- agregó- no se refiere sólo su vida sino que nos toca también a nosotros. Todos estamos llamados por Dios a la santidad”. El postulador de la causa es un dominico francés, el p. Thomas de Gabory. El sacerdote se encontró con Darwin Ramos en las últimas semanas de su vida. “Era un adolescente simple- contó-. Pero su corazón, su vida espiritual fue realmente impresionante. Era profundamente devoto de Jesucristo, no obstante su sufrimiento”.
La diócesis de Cubao recibió el permiso para iniciar el proceso de beatificación el pasado 31 de mayo. Dos meses antes, el card. Angelo Becciu, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, había firmado el ‘Nihil obstat’ para el inicio de la causa. Ésta ahora prevé juntar documentos y testimonios sobre la vida y santidad de Darwin Ramos. Una vez completada, la documentación debe ser enviada al Vaticano, donde la Congregación examinará las informaciones enviadas. Si se constata que el joven condujo una vida heroica de virtudes cristianas, la Iglesia le conferirá el título de “venerable”. Los pasos sucesivos serían la beatificación y la canonización. Normalmente, para la santidad son necesarios 2 milagros determinados por la intercesión del candidato, uno cada uno para la beatificación y otro para la canonización.