Una asfixiante tormenta de arena azota Beijing

Es la peor de los últimos 10 años. Los indicadores de contaminación se disparan. Los proyectos gubernamentales de reforestación no parecen resolver el problema. El país produce el 28% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono. Xi Jinping: promete una "descarbonización" de la economía para el año 2060.

Beijing (AsiaNews/Agencias) – La mayor tormenta de arena de los últimos 10 años envolvió a Beijing y las provincias circundantes, tornando irrespirable el aire y disparando los indicadores de contaminación.

La Oficina de Meteorología anunció alertas para la capital y para 11 provincias del oeste y del norte del país. Las autoridades instan a la población a permanecer adentro y a llevar elementos de protección.

En marzo y abril, los vientos soplan desde el desierto de Gobi y cubren la mayor parte del país con un grueso manto amarillento. Esta mañana, las concentraciones de contaminación por partículas de polvo PM10 alcanzaron el umbral de 500 microgramos por metro cúbico: en algunos distritos el nivel llegó a 8.000. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un límite diario de 50 microgramos.

El centro de control medioambiental de la capital también registró niveles muy elevados de partículas de polvo PM2,5, que es especialmente perjudicial para los pulmones. La cifra de 732 microgramos supera de forma preocupante el límite recomendado por las autoridades sanitarias chinas (35 microgramos por metro cúbico) y la OMS (25 microgramos).

Las arenas estacionales que llegan a Beijing desde el desierto de Gobi exacerban los problemas de contaminación de la capital, rodeada por un denso anillo de zonas industriales. Para frenar las tormentas estacionales, el gobierno lleva adelante proyectos de reforestación desde hace varios años, pero estos no parecen obtener resultados.

La semana pasada, coincidiendo con la sesión anual de la Asamblea Nacional del Pueblo, una espesa capa de smog cubrió la capital. El país produce el 28% de las emisiones de dióxido de carbono del mundo. El Presidente Xi Jinping ha prometido descarbonizar la economía para el año 2060.