Obispo de Hong Kong: Verdad y justicia para el estudiante muerto en los enfrentamientos
Una multitud de cristianos se reunió en Charter Garden, para un encuentro de oración en memoria de Chow Tsz-lok, el estudiante muerto de forma sumamente sospechosa al caerse del techo de un aparcamiento. El prelado, Mons. Ha Chi-shing: “El gobierno debe crear una Comisión de investigación independiente que haga justicia, para la sociedad y para la familia del difunto”.
Hong Kong (AsiaNews) – La comunidad cristiana de Hong Kong se reunió hoy en el Charter Garden (distrito central del Territorio) para realizar un encuentro de oración en memoria de Chow Tsz-lok, el estudiante del segundo año de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong, muerto el 8 de noviembre cuando intentaba huir de la policía. En la noche del 3 al 4 de noviembre, el joven cayó desde un tercer a un segundo piso de un aparcamiento de Tseung Kuan O, mientras trataba de huir de los enfrentamientos en los alrededores del lugar. El muchacho permaneció varios días en coma, internado en el Queen Elizabeth Hospital, pero no pudo sobrevivir.
En tanto, en Hong Kong, hoy continúan los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes: otro joven resultó herido tras recibir un disparo de la policía, pese a que se encontraba desarmado. En las calles hay puestos militares, se registra el lanzamiento de gases lacrimógenos y daños a la propiedad pública. La situación parece destinada a empeorar.
A continuación, publicamos las palabras pronunciadas durante el encuentro por Mons. Ha Chi-shing, obispo auxiliar de Hong Kong. Traducción del chino realizada por Gong Jiao Bao y corrección de AsiaNews.
Cuando recibí la noticia de la muerte del hermano Chow Tsz-lok sentí un gran dolor. Este joven, nacido en 1997 y criado luego del retorno de Hong Kong a China, tenía 22 años y cursaba el segundo año en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong. Era un chico vivaz y activo, a quien le gustaba mucho leer historietas y jugar a los videojuegos: en sus estudios le iba bastante bien, y él hubiera tenido un futuro bello y prometedor. Pero todas estas cosas bellas ya no son sino pasadas.
Esta noche estamos aquí para conmemorarlo, recordarlo y rezar por él: que nuestro Señor misericordioso pueda recibirlo y hacer que descanse en paz. El movimiento anti-extradición ha llegado al quinto mes de protestas: Chow es el primer joven herido y luego muerto durante los conflictos. Pero, ¿cómo fue herido? ¿Cómo y por qué cayó del aparcamiento? Y, ¿cómo se realizaron las tareas para brindarle socorro? Todo esto genera grandes interrogantes entre el pueblo.
La muerte suele ser fuente de dolor y tristeza, y la muerte repentina de un joven nos disgusta y entristece mucho más. Aún así, ¡la muerte del hermano Chow está plagada de dudas y sospechas!
El valor de la vida no tiene precio, y es por eso que debemos hacer lo mejor que podamos para defender y proteger la vida y sensibilizar al hombre, llamándolo a valorizar y amar toda vida. Sin embargo, estamos delante de una vida, la vida de un joven que murió en una situación sospechosa y dudosa. Y esto es algo que ninguna sociedad civilizada puede aceptar, y que nadie que tenga conciencia puede aceptar.
El rector de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong recientemente envió una carta al gobierno solicitando que se instituya un comité investigador independiente para este caso. En la sociedad civil, e incluso en el seno de la policía, se corre el rumor de que exigen una Coroner´s Court [la intervención de un Juez de Instrucción - ndt] . esperamos que el gobierno sea capaz de escuchar estas voces y que a través de la Coroner´s Court se pueda saber la verdad, hacer justicia y sobre todo, dar consuelo a la familia, que tiene el corazón destrozado.
Las manifestaciones se prolongan desde hace meses, y ni siquiera vislumbramos una posibilidad de que esto pueda concluir en paz. Es lamentable que con el paso del tiempo sigan constatándose incidentes violentos, que el nivel de violencia continúe aumentando, y que ambas partes se estén moviendo hacia posiciones extremas. Así, los problemas serán cada vez más difíciles de resolver. Lo que uno ve al caminar por las calles es un gran número de propiedades públicas que está siendo destruido, pero lo que no se ve es que inumerables almas, los corazones de los jóvenes, están siendo erosionadas y torturadas.
Esperamos que la Coroner's Court pueda comenzar a indagar cuanto antes para llegar a la verdad sobre la muerte de Chow. Sin embargo, si todo el movimiento anti-extradición falta a la verdad y no es claro, me temo que la situación seguirá empeorando, y lo que no queremos ver de ninguna manera es nuevas víctimas.
El gobierno ha afirmado una y otra vez que el IPCC es el mecanismo de investigación más adecuado para estos casos, pero un miembro del grupo de expertos internacionales del IPCC puso de relieve públicamente que dicho organismo no tiene las facultades ni la capacidad para conducir investigaciones independientes. Además, él cree que el IPCC no ha cumplido con los estándares de la Organización internacional.
Es por ello que nos dirigimos al gobierno para que escuche a la opinión pública, instituya un comité de investigación independiente y descubra toda la verdad. Es bueno resolver la situación de parálisis en que estamos y dejar que la sociedad vuelva a la senda de la paz.
El Evangelio que acabamos de escuchar nos recuerda las últimas palabras que San Pablo escribe a su discípulo, Timoteo. Quizás Pablo sabe que no le queda mucho tiempo, entonces le dice: “He combatido el buen combate, he terminado la carrera, he conservado la fe”. No sabemos cuál fue el motivo que hizo que Chow saliera de casa y fuera al aparcamiento aquella noche. Pero sin duda, él tiene un corazón que ama a Hong Kong y que está dispuesto a contribuir a la sociedad. Entonces, se puede decir que él ha combatido la buena batalla, que ha terminado la carrera y que ha conservado la fe.
Ahora, encomendamos al hermano Tsz-lok a las manos del Dios Todopoderoso y misericordioso, ¡descansa en paz!.
