Maharashtra: el gobierno cancela las deudas, y los agricultores suspenden la protesta

El jefe de ministros Devendra Fadnavis aumenta los precios de los productos agrícolas y anuncia nuevos préstamos. Los agricultores emprendían una protesta desde el primero de junio. En Madhya Pradesh, el jefe de ministros fija nuevos precios para el grano. Los campesinos reclaman aquello que el premier Modi prometió durante su campaña electoral. Para la política, la cuestión agrícola es una bomba de tiempo.

Mumbai (AsiaNews) – Finalmente, en Maharashtra triunfaron los agricultores. Es lo que se lee esta mañana en todos los diarios indios, tras la decisión del jefe de ministros Devendra Fadnavis de satisfacer las demandas de los agricultores, cancelando sus deudas, elevando los precios de la leche y estipulando nuevos acuerdos económicos. Vista la situación, los agricultores, que estaban en huelga desde el primero de junio pasado, anunciaron el fin de la protesta.

En la India, hace días que el drama de los agricultores ocupa la primera página de todos los periódicos. Miles de personas han tomado las calles de Maharashtra y de Madhya Pradesh,y han bloqueado la producción de fruta y verdura y su distribución en los mercados. Las protestas se originan en virtud de las dramáticas condiciones de vida a las que se ven sometidos aquellos que trabajan en los campos, que suman más del 50% de la mano de obra india. Los manifestantes llevaban adelante una huelga a causa de los préstamos agrícolas, los cuales no logran pagar a raíz del derrumbe de los precios de sus productos.

La merma en sus ganancias se debe a una sobreproducción de los campos, que en los últimos años se han visto diseminados de mecanismos de irrigación destinados a prevenir los períodos de sequía. Pero las enormes cantidades de materias primas, unidas a bajísimos precios al consumo, han llevado a los campesinos a solicitar préstamos, cuyas obligaciones ahora no logran pagar en la mayoría de los casos. La solución, a menudo dramática, y para muchos, desesperada, ha sido el suicidio.

Tras numerosos días de protesta, y una inicial reticencia por parte del jefe de ministros Fadnavis, las posiciones se han suavizado. Él ha accedido a prestar oídos a los reclamos, decidiendo que se proceda a la anulación de las obligaciones contraídas, que la medida sea aplicada a todas las categorías de agricultores, además de estipular nuevos préstamos a tasas convenientes. Algunos agricultores han expresado inmensa satisfacción y alivio: “Para nosotros, esto es como la fiesta del Diwali [de la luz, que simboliza una nueva vida]”.

Simultáneamente, en Madhya Pradesh la situación se ha desbloqueado, y el jefe de ministros Shivraj Singh Chouhan ha decidido fijar un precio mínimo para el grano, además de establecer una serie de medidas fiscales orientadas a estabilizar los precios de los productos; pero no ha anulado las obligaciones en virtud de los préstamos contraídos por los agricultores. En su Estado, las protestas habían tomado un carril violento, y cinco agricultores fueron muertos en los enfrentamientos con la policía del distrito de Mandsaur. Días atrás, otras cuatro personas se quitaron la vida, ahogadas por las deudas. Chouhan incluso había iniciado una huelga de hambre para pedir que se restablezca la paz. La solución positiva llegó en breve, y él sólo debió ayunar por un día.

La cuestión de los agricultores corría el riesgo de transformarse en un tema demasiado espinoso de gobernar para el BJP (Bharatiya Janata Party, partido nacionalista hindú), dado que, en los próximos dos años, en ambos Estados están previstas elecciones para renovar sus autoridades administrativas. En todas partes, se resalta ahora que “el gobierno de Fadnavis debe haber recibido instrucciones de altos funcionarios para resolver el problema lo antes posible”.

Otros observadores evidencian que los reclamos actuales no son más que las promesas electorales que el actual premier Narendra Modi pronunciara durante la campaña electoral del 2014, cuando lanzó una serie de propuestas para el sector agrícola. Para ser más precisos, en un acto en Jharkhand él había prometido que, de ser elegido, habría de “cambiar el precio mínimo” del grano. En otro encuentro en Gujarat, dijo que el BJP habría de “tomar en consideración los gastos asumidos por los agricultores para semillas, sistemas de irrigación, maquinaria agrícola, medicinas, fertilizantes”; todos estos costos serían tomados en cuenta en el cálculo del precio final, de modo de no hacer que éstos no recaigan por entero en el productor. De esto se desprende que la cuestión podría haber asumido un carril mucho más devastador para la política local, beneficiando totalmente a los grupos de oposición –como el Congress de Rahul Gandhi- que ya se disponían a encabezar la protesta de los manifestantes.