Se escapó en 2014, teme las represalias de Beijing. El gobierno chino pide el arresto del magnate. Guo investigado en China por corrupción, secuestro, fraude, reciclaje, y violación. El magnate niega y denuncia intereses políticos. Entre los EEUU y China no existe un tratado de extradición. Su visa turística en América caducará antes de fin de año.  

Nueva York (AsiaNews/Agencias)- El controvertido millonario chino Guo Wengui subscribió un pedido de asilo político al gobierno de EEUU. El tycoon, conocido también como Miles Work, sostiene haber “considerado como  un adversario del régimen chino”. Lo afirma Thomas Ragland, su abogado.

Beijing trata desde hace tiempo arrestar a Guo. Los órganos de prensa acusan al millonario de 50 años de haber corrompido a un vice ministro, delito que el acusado niega haber cometido.

Eb abril, el gobierno chino envió una “señal roja” a Interpol, para pedir el arresto del magnate. Las autoridades chinas refieren que han investigado a Guo por al menos 19 delitos, la policía china inició una nueva investigación por violación.

Los medios chinos afirman que el millonario corrupto el ex vice-ministro de seguridad estatal, Ma Jian, con 60 millones de yuan (unos 8,5 millones de euros). El funcionario fue arrestado y ahora es acusado de corrupción. Guo niega las acusaciones y declara que el mandato de arresto tiene como motivo de fondo intereses políticos.

“El señor Guo teme las represalias del régimen chino por las cosas que está diciendo y la exposición de las cuales es responsable”, declaró ayer el abogado. El magnate, escapado de China en 2014, publicó una serie de tweed y videos en You Tube para denunciar la corrupción de los más altos funcionarios del partido comunista chino. Entre ellos está también Wang Qishan, secretario de la Comisión central para la inspección disciplinar, órgano anti-corrupción de Beijing.

En previsión del 19° Congreso del Partido comunista chino, que inicia el 18 de octubre próximo, él además publicó lo que afirma son secretos de estado. Si bien Guo no dio pruebas substanciales a sus afirmaciones, las acusaciones han provocado la ira de Beijing.

Entre los EEUU y China no existe ningún tratado de extradición. Para repatriar a los fugitivos a su país de origen, ambas partes deben realizar coloquios bilaterales para cada caso.

Siendo solicitante de asilo, el magnate chino, cuya visa turística finalizará dentro de fin de año, tiene el derecho de permanecer en los EEUU hasta cuando las autoridades americanas no habrán tomado una decisión definitiva. La duración media del proceso está entre los 2 o 3 años.

En EEUU, Guo enfrentó una serie de causas por difamación por parte de diversos individuos y empresas chinas. El hombre declara que no es más un ciudadano chino. En el mes de abril, durante una entrevista dada a Voice of America, el magnate había revelado estar en posesión de los pasaportes de 11 países. Sin embargo, él no aclaró porque no trate de transferirse a otro país, una vez que caduque su visa estadounidense.