El gobierno de Hong Kong "cancela" Occupy Central de su reporte a Beijing
Hong Kong (AsiaNews)- En su reporte sobre los deseos de democracia que la población de Hong Kong nutre, el jefe del ejecutivo Leung Chun-ying ni siquiera ha nombrado al movimiento Occupy Central , ni las marchas por la democracia, ni las presiones de los académicos, empresarios y políticos sobre la necesidad de garantizar el sufragio universal en el territorio.
Las relaciones en realidad son dos- muy similares: el de la secretaria general Carrie Lam, presentado hoy al Legilative Council (Legco, el mini-parlamento de Hong Kong) y el del gobernador que presentará al Comité permanente de la Asamblea nacional del pueblo de Beijing.
En ambos casos si lee que según el gobernador. "la opinión dominante" en el territorio es que la elección del ejecutivo suceda como ahora, o sea a través de un comité de 1200 personas- más o menos- en mayoría elegidos por Beijing misma.
En los meses pasados, el movimiento Occupy central logró sensibilizar a la población para pedir el sufragio universal, o sea la elección directa del ejecutivo. Por eso éstos han organizado sentadas y hasta un referendum no oficial en el cual han participado cerca de 800 mil personas Días después al menos 510 mil personas han participado en una marcha por la democracia el primero de julio. Para el jefe del ejecutivo esta enorme masa de personas son solamente "algunas visiones divergentes", ni siquiera dignas de ser citadas por nombre.
La relación pretende afirmar también que entre la gente no se siente "ninguna necesidad" a hacerlo más democrático al Legco, en el cual sólo la mitad de los parlamentarios es votada por el público en modo directo.
Siguiendo paso a paso el deseo y las expresiones de Beijing, la relación explica que el nuevo jefe del ejecutivo, que debería subir al cargo en el año 2017, debe "amar" a la nación [China], y amar a Hong Kong.
En los días pasados el card. Joseph Zen y los tres nuevos obispos auxiliares de la diocesis han apoyado las batallas por la democracia. Los obispos también han pedido al gobernador de atrasar la presentación al pueblo de Beijing, para permitir un diálogo más profundo con la población.
La relación del jefe del ejecutivo, oficialmente fue precedido por 5 meses de consultación con el público, pero el comentario entre la gente de Hong Kong es que el "resultado podía estar escrito ya hace 5 meses": la consultación no existió o fue ficticia.