Yemen hacia la división: se procede a la limpieza étnico-geográfica

Miles de personas del norte, que viven en el sur del país, son expulsados de sus hogares. Se aterroriza a la población con las persecuciones, los despidos, imprecaciones por parte de los comités de seguridad y de las tropas sauditas aliadas.

Aden (AsiaNews) - Los residentes yemenitas originarios del norte del país son alejados por la fuerza de Adén, en el sur. Iniciada en el 2015, la campaña de extracción forzada se reanudó en los últimos días con un ritmo más rápido. Estas actividades de limpieza "étnico-geográfica", parece estar yendo hacia una purificación total de elementos yemeníes del norte. Muchos temen que detrás de estas acciones se está preparando una partición del país, como ya que era antes de 1990.

La "campaña de limpieza" pretende homogeneizar la composición demográfica de la parte sur de Yemen. Esto es querido por Abdrabbu Mansur Hadi, el presidente demitido, que cuenta con el apoyo directo de los Estados Árabes Unidos y Arabia Saudita, pero encuentra el disenso entre muchos exponentes yemeníes. Los temores de que el país se encamine a una nueva división también se incrementaron, por la llegada de nuevas tropas estadounidenses al país.

La persecución de los ciudadanos de un mismo país, basada en la pertenencia a un área geográfica, no se puede llamar "limpieza étnica", en cuanto se trata de los mismos miembros del grupo étnico. Pero podemos hablar de "limpieza geográfica", con connotación racista.

A principios de esta semana cientos de trabajadores del norte de Saná fueron rechazados. En una semana, las autoridades de seguridad locales designados por Hadi, han deportado desde Aden a 842 trabajadores originarios de Taaz.

Las autoridades yemeníes locales se niegan a hablar de la persecución dirigida, pero los hechos demuestran que los deportados son todas las zonas del norte. Justifican estas acciones diciendo que los trabajadores expulsados "no tenían documentos de identidad".

Interrogados por la "Comisión de diffesa los derechos de los refugiados del Norte y del Sur", los exiliados han denunciado como falso el motivo de la expulsión y a los activistas de ONG han exhibido de tarjetas de identidad nacional en su posesión. El hecho ocurrió en la zona de Tor, a medio camino entre las dos provincias de Al Haj y Taaz, antes de llegar al destino final, y fue tomada por las cámaras de televisión (v. Foto).

Denunciadas incluso por las imágenes, las autoridades del sur de Yemen han tenido que cambiar de versión, acusando a los exiliados de ser "informantes de Ansar Allah y la Guardia Presidencial", añadiendo incluso el cargo de "falsificación de documentos por cuenta de la oposición del Sur".

En octubre del año pasado las fuerzas de seguridad respaldadas por los Emiratos Árabes Unidos han rastrillado otras 400 personas procedentes del norte y desterrados al Norte, acusados de estar "carentes de documentos de identidad".

El ex ministro de la cultura yemení Arwa Osman comentó esta "expulsión" como una "imagen degradante del hombre y de su dignidad".

La "limpieza geográfica" comenzó en marzo de 2015, cuando los grupos armados pro Abdrabbu Hadi, junto con los miembros de Al Qaeda y las milicias armadas locales, han ocupado la sede de la Central de seguridad en Aden, junto con los edificios de viviendas y negocios de la gente originaria del Norte. Esto fue seguido por el despido de todos los funcionarios originarios del Norte. La campaña de odio "geográfico" se ha intensificado después, con el pasaje de Adén bajo el control de "comités de seguridad", y alcanzó el pico en agosto pasado, después de la entrada de tropas de Arabia Saudita, llamadas "fuerzas aliadas" de Hadi. La persecución se ha vuelto incluso física, obligando a miles de familias a huir del Norte "voluntariamente" por el acoso, abuso de poder, la tortura y los homicidios. Se ha registrado el saqueo generalizado de tiendas pertenecientes a los norteños y ejecuciones en la plaza pública, donde muchos han sido colgados con la acusación de formar parte del grupo Ansar Allah, o de "colaborar" con ellos.

También hay abuso diario: con la excusa de buscar depósitos de armas, las casas de los norteños son invadidas y los residentes sujetos a acoso de cualquier tipo.

Esta campaña de odio está cortando el país por la mitad, a 25 años de la reunificación. Después de la caída del Imperio Otomano y el final de la Primera Guerra Mundial, Yemen se dividió en una parte independiente y otro bajo mandato británico. Con la caída del muro de Berlín, el Yemen se reunificó, aunque siempre ha habido tensiones entre el norte y el sur. (PB)