Yeda, la Corte obliga a un padre a pedir el pasaporte para su hija mayor de edad

Las mujeres deben tener el permiso de un pariente hombre para poder viajar. La joven había solicitado permiso al padre, a quien no veía desde hacía seis años. Ante su negativa, ella se dirigió al tribunal. El caso vuelve a encender el debate en las redes sociales.

Yeda (AsiaNews/Agencias) – Una Corte civil saudita dio la razón a una joven mujer, obligando al padre a solicitar el pasaporte para su hija mayor de edad. La noticia fue difundida por los medios sauditas e incluso por aquellos más oficialistas, como Okaz.

La joven lleva diez años viviendo con su madre y no tenía contacto con su padre desde hacía seis. Sin embargo, ateniéndose a la ley del “guardián”, ella necesitaba de su permiso para obtener el pasaporte y viajar al exterior. Cuando el padre expresó su desacuerdo, la joven decidió dirigirse a la justicia saudita que – en una sentencia bastante rara – le dio la razón, conminando al progenitor a presentar de inmediato la solicitud de pasaporte.

El caso volvió a encender el debate siempre vigente en torno a la norma que obliga a las mujeres sauditas a tener el permiso de un “guardián” – el padre, el marido, el hijo u otro pariente de sexo masculino- para viajar, casarse o desarrollar otras actividades. Numerosos usuarios expresaron su opinión en Twitter, comentando las contradicciones y la injusticia del sistema. En uno de los comentarios, una saudita se quejaba de que incluso las mujeres adultas deben pedir el permiso, a veces, a parientes (caso del hijo) más jóvenes que ella. Una práctica que para ella resulta “ofensiva y humillante”.

Arabia Saudita ha lanzado una serie de reformas sociales para suavizar las restricciones impuestas a las mujeres, aboliendo la prohibición de conducir y abriendo las puertas de los estadios para ellas. Sin embargo, los grupos que defienden los derechos humanos continúan criticando al país wahabita por la prolongación del sistema de guardián, en base al cual los hombres pueden ejercer una arbitraria autoridad sobre la vida de las mujeres cuando los une una relación de parentesco. Ha sido precisamente la cuestión de los derechos humanos el punto que dio origen a la actual crisis diplomática con Ottawa, que ha pedido la inmediata liberación de los activistas (entre ellos, mujeres) arrestados en los últimos meses.