Yangon, provocaciones contra el Papa. Budistas solidarios con los católicos
Aye Ne Win, nieto del general y ex dictador birmano Ne Win, disfrazado de pontífice para Holloween. Los nacionalistas acusan al Papa de colaboracionismo con los Rohingyá. La Iglesia birmana disminuye el tono de las polémicas. Los preparativos para el viaje apostólico. También los monjes budistas recibirán a los fieles.
Yangon (AsiaNews)- La población budista birmana expresa cercanía y solidaridad a la pequeña comunidad católica, objeto en los últimos días de algunas provocaciones en vista de la próxima visita apostólica del Papa Francisco al país (27-30 de noviembre).
Las polémicas nacieron por las fotografías que hacen ver a Aye Ne Win, nieto del general y ex dictador birmano Ne Win, impartir “bendiciones” disfrazado de pontífice en un party de Folloween (foto 2). Los católicos expresan en las redes sociales su propia indignación por el provocativo disfraz, recibiendo el apoyo de los budistas que se declaran ofendidos. Muchos ven en el acto burlesco un intento por parte de los militares y de grupos extremistas de crear conflictos con la minoría cristiana, en la vigilia del histórico viaje del Papa.
Exponentes del poder militar y franjas extremistas del budismo nacionalista, como el movimiento Ma Ba Tha, en el último período han manifestado en internet su propia aversión por la visita del pontífice, acusado de colaboracionismo con la minoría musulmana de los Rohingyá. En sustento de sus tesis, estos individuos han hecho circular en las redes sociales las imágenes de la lavanda de los pies que el Papa Francisco realizó en la cárcel de Paliano el pasado abril. Durante la ceremonia, el Papa había lavado los pies de un detenido musulmán.
Los extremistas además han recordado el pedido en favor de los Rohingyás lanzado por el pontífice durante el Ángelus del pasado 27 de agosto, que había desencadenado duras críticas en Myanmar. La mayoría de población había criticado la invitación del Papa a la oración para el reconocimiento de los derechos de la minoría musulmana, detestada en gran parte por parte de los birmanos. Lo que más suscitó desaprobación de la opinión pública fue en particular que el Papa usó la palabra “Rohingyás. Porque tal minoría étnica no es considerada como una de las 135 etnias oficiales de Myanmar y es costumbre referirse a ella con la expresión “musulmanes de Rakhine”, por la región donde residen.
La Iglesia birmana, voz con mucha autoridad en apoyo del difícil proceso de reconciliación nacional iniciado por la líder democrática Aung San Suu Kyi, no recogió las últimas provocaciones de los extremistas y se dedicó a aplacar las polémicas. El p. Mariano Soe Naing, vocero de la Conferencia episcopal de Myanmar (CBNM) y director de la Ofici8na para la comunicación social (CBCMOSca), declara a AsiaNews: “El episodio que ha visto como protagonista al nieto de Ne Win es deplorable. Sin embargo, por cuanto sea criticable, se trata siempre de una fiesta de disfraces y la cosa termina allí. Nuestra relación con los conciudadanos budistas es muy buena, no existen hostilidades. No hay nada que te por la visita papal. Los problemas podrían surgir si el Santo Padre utilizará el término ‘Rohingyás’. Esto daría pretexto a los extremistas para crear tensiones”.
La comunidad católica para recibir al Papa Francisco con “devoción y oración”, mientras están en pleno funcionamiento los preparativos para su llegada. “Por el momento- afirma el p. Mariano Soe Naing – estamos concentrados en el planificar la acogida de aquellos que tomarán parte en la solemne misa, que la mañana del 29 de noviembre el Papa celebrará en el Kyaikkasan Ground de Yangon. Todas nuestras parroquias estarán a disposición para donde deban dormir los peregrinos. La noche precedente a la función, también casi todos los conventos budistas abrirán sus puertas a nuestros fieles. Nos esperamos la presencia de más de 100 mil personas católicas durante la visita del S. Padre”.
Como testimonio del compromiso de la Iglesia católica por el diálogo y la reconciliación nacional, pocas horas antes de la misa el Papa Francisco tendrá un encuentro con el Consejo Supremo “Sangha” de los monjes budistas birmanos (máxima autoridad budista del país, Ndr) en el Kaba Aye Center. “Hemos efectuado controles y con los monjes nos hemos puesto de acuerdo sobre las modalidades del encuentro y sobre la composición de las delegaciones. Desafortunadamente y a causa de los compromisos del Papa con las autoridades birmanas en Nay Pyi Taw, el encuentro con todos los líderes religiosos del país previsto para el 30 de noviembre tuvo que ser anulado”, afirma el vocero de la CBNM.
Lawrence Jangma Gam, colaborador de AsiaNews, narra desde Yangon: “El disfraz de Aye Ne Win suscitó una dura reacción de los católicos en internet, sobre todo en los jóvenes. Sin embargo, las tensiones tuvieron sólo repercusión en las redes sociales. Los extremistas juegan con la ignorancia por parte de los budistas en relación con los cristianos, pero no existe ninguna seria amenaza por la seguridad del S. Padre. El gobierno, con el cual la S. Sede tuvo últimamente importantes encuentros, será garante de este viaje apostólico. El ejército dirige todas las cuestiones referidas a la seguridad y no creo permitirá que nada suceda, desde el momento que el país está sufriendo una gran presión internacional por la crisis en Rakhine. Quizás los movimientos nacionalistas organicen manifestaciones contra el Papa, pero los ciudadanos comunes no están contra el viaje apostólico. El Papa tendrá un servicio personal de seguridad y también la Conferencia episcopal está tomando medidas al respecto”.