El proyecto de ley fue aprobado por unanimidad en la Cámara Baja. Ahora espera que el Senado dé luz verde. Limita los poderes de Trump y endurece las relaciones con Rusia. Se prevé suspender actividades con las empresas que trabajan en los gasoductos de Rusia. Medidas drásticas contra aquél que emprenda negocios con Corea del Norte e Irán. 

 Washington (AsiaNews/Agencias) - La Cámara de Representantes estadounidense aprobó en el día de ayer un paquete de sanciones contra Rusia, Irán y Corea del Norte. Pero en particular, el proyecto de ley busca impedir que el presidente Donald Trump pueda establecer sanciones unilateralmente en su función de presidente de los Estados Unidos. En efecto, el texto pide que sea prerrogativa de la Administración americana intervenir con sanciones, incluso en lo que respecta a la presunta intrusión del líder ruso Vladimir Putin en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos celebradas en 2016. Los funcionarios de mayor trayectoria de la Administración –y no Trump-  serán los encargados de establecer las sanciones por las presuntas interferencias rusas.

Trump se opone a este proyecto de ley, el cual aún debe pasar por el filtro del Senado, antes de ser enviado al presidente para su firma o para el veto. Él insiste en el hecho de que no ha recibido ningún tipo de ayuda de Moscú para vencer en la carrera por la presidencia. Incluso subraya la importancia de la cooperación bilateral en cuestiones como el terrorismo y la guerra en Siria.  

El paquete de nuevas normas también incluye sanciones contra el financiamiento de programas misilísticos y nucleares de Corea del Norte. En particular, se prohíbe a “todas las naves que posea el gobierno de Corea del Norte, así como a las de cualquier otro país que no respete las resoluciones del Consejo de seguridad de la ONU, operar en las aguas de los Estados Unidos o aterrizar en cualquier puerto de los Estados Unidos”. Además, prohíbe la entrada a los Estados Unidos de las mercaderías producidas en todo o en parte por el trabajo forzado norcoreano. La ley autoriza a implementar sanciones contra aquellos que provean a Corea del Norte de petróleo crudo y de sus derivados, y solicita a la Administración que establezca si Corea del Norte alimenta el terrorismo internacional.

Por último, el proyecto de ley solicita sanciones para ciudadanos o entidades iraníes vinculados a los programas misilísticos de ese país.

El borrador de la ley pasó la Cámara de representantes con 419 votos a favor y 3 en contra. El orador Paul Ryan lo describió como un paquete de sanciones “que representan medias drásticas contra nuestros adversarios más peligrosos, para mantener seguros a los americanos”.

 

Los Estados Unidos ya implementaron una serie de sanciones en relación a individuos y sociedades rusas en Crimea. Pero las nuevas normas aumentan las restricciones pasando a afectar a quienes hagan negocios con las sociedades rusas, en particular en el sector energético. Una medida dirigida a países europeos que sostienen los proyectos rusos de gasoductos. Las mismas darán lugar a nuevas restricciones sobre proyectos relacionados con el petróleo y el gas, que influencian el gasoducto Nord Stream 2, que va desde Rusia hasta Alemania.

Desde el punto de vista legislativo, el aspecto más delicado concierne a la Casa Blanca, por la medida que limita el derecho tradicional del presidente en lo que respecta a imponer sanciones: Trump se vería obligado a consultar antes al Congreso El presidente podría aplicar el veto sobre el proyecto de ley, pero en ese caso alimentaría la sospecha de que él está ligado al Kremlin de alguna manera. Además, el eventual veto presidencial puede ser ignorado si dos tercios de la Cámara y del Senado votan a favor de pasar por alto el juicio del presidente.

El proyecto provoca ira en Moscú, pero también en Europa, porque implica que las empresas europeas podrían ser penalizadas. Desde París a Berlín, pasando por Bruselas, la iniciativa del Congreso de los Estados Unidos no agrada, porque es unilateral. Hasta ahora, el régimen de las sanciones contra Rusia era coordinado por ambos lados del Atlántico. Los Estados miembros de la Unión Europea se reunirán hoy en Bruselas para afrontar la cuestión. Varios países europeos, entre ellos Alemania, se oponen al proyecto, puesto que la ley daría a los Estados Unidos la posibilidad de bloquear a las empresas que trabajan en los conductos de gas proveniente de Rusia, además de dejarlas fuera de los mercados americanos. 

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