Vida consagrada, las claustrales hindúes festejan con 6 nuevas religiosas
Mumbai (AsiaNews)- Hoy es el día mundial de la 19° Jornada mundial de la Vida Consagrada y las carmelitas descalzas en India renuevan la "alegre gratitud hacia el Señor" con el cual celebran el Año de la Vida Consagrada en curso. En las próximas semanas 6 monjas profesarán solemnemente sus votos perpetuos, entrando definitivamente en la orden. El 2015 será un año importante para las carmelitas también porque se festeja el 500° aniversario del nacimiento de S. Teresa de Ávila, reformadora de la orden.
Las 6 nuevas claustrales provienen de monasterios esparcidos en todo el país: Sitagarha, Patna, Goa, Sivagangai. Yercaud y Kumbakonan. Para subrayar la importancia coincidencia de su profesión definitiva con el Año de la Vida Consagrada, las religiosas han frecuentado un curso intensivo en el monasterio carmelita de Baroda. Aquí se han encontrado con personalidades competentes, que tenía como tarea la de ayudarlas a evaluar la elección contemplativa de ellas. Profundizando su amor por Jesús y por las Sagradas Escrituras.
Hablando con AsiaNews la priora del monasterio de Baroda explica que la apertura del Año de la Vida Consagrada (30 de noviembre 2014) "fue la primera vez en la cual nosotros contemplativas hemos celebrado una liturgia junto a las congregaciones activas". Para la ocasión de hecho, las claustrales han invitado a las Misioneras de la caridad y a la Hermanas Auxiliadoras a celebrar juntas la Eucaristía.
"Este tiempo-explica la priora a Asianews -es realmente especial para nosotras carmelitas descalzas, porque en el medio del Año de la Vida Consagrada festejaremos también el 500° aniversario del nacimiento de S. Teresa de Ávila.
Dada la excepcional coincidencia, "cada religiosa tuvo la indicación de ensimismarse en otras figuras de la sociedad: un doctor, u periodista, un hindú, un barrendero, hasta en el Papa Francisco... Han compartido con nosotros esta experiencia contando y personificando a estos diferentes personajes, elegidos porque los sentían a ellos cercanos, o porque querían rezar por ellos. Fue un momento muy emocionante, todas han descubierto un matiz más profundo de sus propias llamadas para ser carmelitas.