Vicario de Arabia: el corazón 'desmilitarizado' de los cristianos, contra los conflictos y la violencia

Del 13 al 16 de enero se planea realiza el encuentro general Avosa. Para la edición del 2020, el tema elegido es: "La misión de nuestra Iglesia en un contexto moderno". Mons. Hinder: en una realidad hecha de guerras y tensiones, ser "testigos creíbles de fraternidad y confianza mutua" es la tarea de los cristianos.

Abu Dabi (AsiaNews) - "Mirando los conflictos y las divisiones en Oriente Medio, enmarco la misión de la Iglesia especialmente en su ser un testimonio creíble de fraternidad y confianza mutua”. Esto es lo que Mons. Paul Hinder, Vicario Apostólico de Arabia del Sur (Emiratos Árabes Unidos, Omán y Yemen) dijo a AsiaNews, presentando la reunión general anual de Avosa programada para el 13-16 de enero cerca de la catedral de San José en Abu Dabi. El tema de la edición del 2020 es "La misión de nuestra Iglesia en un contexto moderno". "Entre nosotros, debemos vivir una unidad en la diversidad de expresiones"- subrayó el prelado - acompañada de "la apertura hacia personas de otros credos y culturas".

En una región del Oriente Medio marcada por los conflictos, las armas y la violencia, el prelado pide a los cristianos que mantengan un "corazón desmilitarizado" y, por tanto, "capaz de compartir este don con los demás" siguiendo "el ejemplo que nos dio Jesucristo". Desde este punto de vista, considera "crucial" que los laicos "no sólo sean acogidos para las celebraciones sacramentales" o "utilizados en los servicios" de las iglesias, sino que "se les tome más en serio en las responsabilidades básicas" que recaen sobre los sacerdotes y el clero en general.

En el encuentro anual participan sacerdotes, religiosos, religiosas, jefes de oficinas pastorales, incluidos los laicos responsables, entre otros, de la familia, las comunicaciones, la administración financiera, la formación, la escuela, de los Emiratos y de Omán. No habrá delegados de Yemen, debido al continuo conflicto que también ha afectado a la propia comunidad cristiana. Presidirá los cuatro días de trabajo el Vicario de Arabia, junto con el Nuncio Apostólico, Mons. Francisco Montecillo Padilla, que pronunciará un discurso ante los participantes.

Durante la asamblea general, Mons. Hinder y los jefes de las distintas oficinas presentaran el informe anual del año pasado. Este acontecimiento, explica el prelado, es uno de los momentos "más importantes" para la vida de la Iglesia local al servicio de la "unidad" y como estímulo para la realización de proyectos e iniciativas de sacerdotes, religiosos y laicos. Se desarrolla a través de dos "dimensiones": la identidad del Vicariato como Iglesia migrante en la Península Arábiga y su visión pastoral.

La primera de estas tareas, recuerda Mons. Hinder, es precisamente una misión de diálogo y de encuentro en un contexto con vasta mayoría musulmana, sobre la base del trabajo promovido en el pasado por los capuchinos. En este contexto, es responsabilidad del vicariato promover el plan pastoral y alimentar los diversos aspectos que caracterizan la vida de los fieles.

La Asamblea General, cuyo primer encuentro se remonta a 1976 por intuición del entonces vicario Bernardo Gremoli, incluye también encuentros, una presentación del estado de los trabajos y una sesión final sobre los temas de la liturgia y la pastoral, junto con los futuros desafíos para la Iglesia local. El trabajo no termina con el evento en Abu Dhabi, sino que continuará en cada parroquia en los meses siguientes según un calendario preestablecido.

El Vicariato Apostólico de Arabia del Sur abarca una superficie total de unos 929.000 km2. Según las estadísticas oficiales, de un total de casi 43 millones de personas hay 999.000 católicos. El territorio está dividido en 16 parroquias; hay 18 sacerdotes diocesanos, más otros 49 sacerdotes de institutos religiosos y un diácono permanente. Las monjas activas en el territorio - y pertenecientes a diferentes órdenes - son 50, a las que se añade un hermano laico.

Desde una zona con una gran mayoría musulmana, en el pasado reciente ha habido signos alentadores de diálogo y confrontación. En febrero, los Emiratos acogieron por primera vez a un pontífice en una nación del Golfo: más de 120.000 fieles asistieron a la misa del Papa Francisco, en un evento que marcó época y que fue reproducido por una de las principales emisoras locales en un documental. A la visita se añadieron otros acontecimientos, como la reapertura del sitio más antiguo, la inauguración de una parroquia en Omán y una creciente presencia de laicos en la misión.