Una nueva iglesia en la periferia de Daca, signo de ‘Cristo entre los migrantes’ (Fotos)
La parroquia de la Divina Misericordia, inaugurada el 24 de noviembre, se levanta en el barrio de Gulshan, donde hace tres años se produjo el atentado terrorista en el Holey Artisan Bakery Café. Los fieles, en su mayor parte tribales, aguardaban el lugar de culto desde hacía 40 años. Párroco: “Los católicos están contentos, porque ahora tienen una iglesia que atenderá sus necesidades espirituales”.
Daca (AsiaNews) – Una nueva parroquia en la arquidiócesis de Daca, signo de la presencia vital de la Iglesia católica en las periferias de Bangladés: es la iglesia de la Divina Misericordia, inaugurada el 24 de noviembre pasado con la presencia del Nuncio apostólico, Mons. George Kocherry, y del card. Patrick D’Rozario, arzobispo de la capital. También 20 sacerdotes estuvieron presentes en la ocasión. Al término de la función, Mons. Kocherry entregó al Padre Gomes un ostensorio, regalo del Papa Francisco. En diálogo con AsiaNews, el párroco, Pbro. Brien C. Gomes, de 40 años, se refiere a “la alegría de los fieles locales, cerca de 8.000 católicos, que finalmente tienen la parroquia que esperaban desde hacía 40 años. Ya no tendrán que viajar lejos para rezar o recibir los sacramentos”.
En la ceremonia estuvieron presentes 900 fieles, religiosas y líderes religiosos musulmanes. El nacimiento de una nueva parroquia en un país con población mayoritaria musulmana, sostiene el párroco, “es un signo positivo de armonía y diálogo entre las religiones”. La iglesia se levanta en el barrio de Gulshan, sede de numerosas embajadas y caracterizado por la presencia masiva de migrantes internos. Aquí viven “cuando menos 1000 familias católicas, en su mayor parte tribales, que se convirtieron hace más de 50 años y emigraron desde varias zonas del país. Tenemos la comunidad Garo, proveniente de Mymensingh; los Santal y los Orao, de Rajshahi; los bengalíes del área de Khulna y Barisal. En general, los padres han tenido poca instrucción formal y trabajan como empleados domésticos, en centros de estética, como operarios jornaleros o en las sedes diplomáticas. Los hijos, en cambio, van a la escuela y tienen un buen nivel académico”.
Gulshan es el vecindario donde en el 2016 un comando islámico asaltó un restaurante frecuentado por extranjeros, matando a 22 personas en total, sumando clientes y personal. En la zona, explica el párroco, “estamos rodeados de personas de otras religiones, pero jamás recibimos amenazas que hicieran peligrar nuestra seguridad. Ayer se anunció el veredicto para los terroristas, y tampoco sucedió nada. Hubiera habido riesgos si se organizaban manifestaciones, pero todo estuvo tranquilo”.
En el pasado, esta iglesia suburbana fue una parroquia dependiente de la Holy Rosary Church de Tejgaon. Los principales desafíos, prosigue el Padre Gomes, “se refieren a la falta de tierras, los matrimonios mixtos entre distintos grupos étnicos y las relaciones sexuales prematrimoniales. Por ejemplo, en la cultura Garo existe un tipo de ceremonia nupcial particular, según la cual se considera que dos jóvenes que han pasado la noche juntos quedan automáticamente unidos en matrimonio, aún cuando no haya existido una ceremonia religiosa o civil. Se trata de una práctica muy difundida que tratamos de combatir con un cambio de mentalidad, haciendo comprender el valor del matrimonio. Hacemos hincapié en la importancia de la ética y de la moral, incentivando la participación en el catecismo, en clases dedicadas a todas las edades, para difundir las enseñanzas del Evangelio”.
El objetivo es “sostener la espiritualidad de los fieles, para que no sigan caminos equivocados, y puedan tener una vida más ética”. Para esto, es importante “el trabajo de los catequistas: por el momento, son dos: uno es bengalí y el otro, Garo”. Algunas de las iniciativas que él quiere llevar adelante en el 2020 son “la visita a las familias, la creación de un grupo juvenil y de un lugar donde puedan compartir experiencias de fe y de vida”.
En lo que respecta al diálogo con las religiones, el Padre Gomes afirma que “en Bangladés, la Iglesia se dedica particularmente a atender las necesidades de los musulmanes y tribales. Los cristianos aman a todos de manera compasiva”. Esperamos que la comunidad crezca – concluye –; quisiéramos construir una iglesia más grande, porque el edificio actual no logra albergar a todos los parroquianos, y también un centro espiritual, para la formación en los sacramentos”. (A.C.F.)