Turquía: aumenta el número de los que se declaran ateos
Se considera que el hecho es una reacción a la política de corte religioso que lleva adelante el omnipotente presidente, que es aplicada fundamentalmente en la administración pública. Sin embargo, según el escritor y teólogo turco Cemil Kilic, aunque el 99% se declare de fe islámica, esto no significa que esta determine la vida de los turcos.
Estambul (AsiaNews) – Aumenta en Turquía el número de ciudadanos que se declara ateo y disminuye el número de aquellos que dicen ser musulmanes. El dato es el resultado de un sondeo conducido recientemente por la sociedad demoscópica turca Konda, difundido por la DW alemana, según el cual el número de aquellos que declaran profesar el credo musulmán ha caído del 55% al 51%.
Esto significa que en la Turquía neo-otomana de Tayip Erdogan -que basa su política en los principios morales de la fe musulmana- crece la huida hacia el ateísmo. Se considera que esto es una reacción a la política de corte religioso del omnipotente presidente, que es aplicada sobre todo en la administración pública.
La difusión del conformismo islámico en la vida cotidiana turca es vivida por muchos como una imposición y comienza a fastidiar a un gran número de personas, sobre todo en los grandes centros, pero continúa hallando una recepción positiva en Anatolia.
No son pocos los que se cuestionan si identificar al país con los dictámenes morales del islam – a los cuales Erdogan suele recurrir- representa de verdad a Turquía. Por otra parte, no hay que olvidar que el nacimiento de la Turquía republicana ha sido basado en el principio de que el verdadero turco se identifica con ser musulmán y declararse como tal. Motivo por el cual, en los ambientes conservadores –y afirmado en 2014 por el Ministerio de Culto- prevalece la opinión de que el 99% de la población turca está constituida por musulmanes.
Sin embargo, según el escritor y teólogo turco Cemil Kilic, si el 99% declara ser de fe islámica, eso no significa que esta determine la vida de los turcos. Frecuentar la mezquita y rezar, ayunar, o incluso llevar el turban para las mujeres no determina, según Kilic, que estamos en presencia de practicantes de la fe islámica, sino que es importante sobre todo seguir los principios éticos del islamismo. Según estima él, en Turquía, los verdaderos practicantes rondarían el 60%.
A este generalizado y evidente conformismo y oportunismo político que rige actualmente en Turquía, como lo definen los empleados del sector de asuntos internos turcos, Cemil Kilic lo compara con los sultanes omeyas de siglo VII que, contrariamente a lo que dice el Corán, que consideraba la oración como un acto contra las injusticias, veían en la oración un acto de obediencia al sultán. Ora a Tayip Erdogan.
Por último, Zehra Pala, la presidenta de la asociación de los ateos turcos, considera que las insistentes presiones del presidente Erdogan sobre las últimas generaciones, para que abracen los dictámenes moralistas del Islam, han obtenido un resultado opuesto al buscado, sobre todo entre los jóvenes de buena preparación cultural, que están optando por huir al exterior.
En tanto, Erdogan ha dado su visto bueno para la construcción de una iglesia para los sirios ortodoxos que viven en Estambul. Será la primera iglesia cristiana construida en la Turquía republicana.
Otros ejemplo de las frecuentes contradicciones del planeta turco, en su búsqueda perenne por una identidad propia.
31/12/2018 13:26
