Tokio, ordenación de Mons. Lembo: 'Un signo de esperanza en la metrópoli'

El arzobispo Kikuchi ha conferido hoy el ministerio episcopal al misionero italiano del PIME convocado por el Papa Francisco para acompañarlo como obispo auxiliar. "Como yo os he amado" es el lema que ha elegido. En su agradecimiento el nuevo obispo recordó a Mons. Mori fallecido hace pocas semanas: “Desde el Cielo ayúdanos a ser una Iglesia acogedora para los que buscan consuelo”.

Tokio (AsiaNews)- “Has sido llamado a ser la esperanza del pueblo. En este Japón nuestro, que hoy enfrenta tantos desafíos, mira a tu rebaño con compasión. Vive de esa manera tu ministerio entre los jóvenes y en la sociedad".

Con estas palabras el arzobispo de Tokio, mons. Tarcisio Isao Kikuchi saludó hoy al nuevo obispo auxiliar de la capital japonesa, mons. Andrea Lembo - misionero italiano del PIME - en la solemne liturgia durante la cual le confirió la ordenación episcopal en la catedral de Santa María, en el barrio de Bunkyo. Junto a él, como co-consagradores, estaban el obispo de Yokohama, mons. Rafael Masahiro Umemura y el obispo de Sapporo Mons. Bernard Taiji Katsuya.

La celebración se llevó a cabo al mediodía en presencia de toda la Conferencia Episcopal japonesa, del obispo Raymond Sumlut Gam de Banmaw en Myanmar - país herido con el cual la Iglesia de Tokio mantiene desde hace tiempo una relación de hermanamiento-, el clero diocesano y dos representantes de cada parroquia, mientras que el resto de la comunidad diocesana siguió el rito vía streaming. Para la ocasión también se reunieron para acompañar al nuevo obispo los hermanos del PIME de Japón y de otros países de Asia Oriental, encabezados por el superior general del instituto, p. Ferruccio Brambillasca, y una delegación que llegó de Treviglio, su ciudad natal en Italia, junto a la familia del nuevo obispo.

Mons. Lembo fue nombrado por el Papa Francisco el 16 de septiembre, tiene 49 años y es misionero en la capital japonesa desde 2009. Prestó servicio en las parroquias de Itabashi y Narashino y fue párroco en Fuchu. Desde 2021 es presidente del Shinseikaikan, el centro cultural diocesano que tiene su sede en el distrito de Shinjuku, uno de las grandes centros de la metrópoli.

El nuevo obispo auxiliar recordó a todas las personas que lo acompañaron en estas experiencias en el breve discurso de agradecimiento al final de la celebración. “Quiero hacer un agradecimiento especial a los jóvenes y a los dos párrocos japoneses que me acompañaron y me enseñaron muchas cosas en los primeros años de ministerio”, dijo. También recordó a Mons. Kazuhiro Mori, que fue obispo auxiliar de Tokio y falleció hace pocas semanas a la edad de 84 años. “Monseñor Mori - contó - nos dijo que la Iglesia debería ser como un onsen, el agua termal donde la gente viene a recuperar fuerzas. Le pedimos que nos mire desde el Cielo y nos ayude a tener este corazón acogedor, capaz de dar alivio al que busca consuelo".

El lema episcopal que eligió Mons. Lembo es la frase del Evangelio de Juan "Como yo os he amado" (Juan 13,34) y en su escudo quiso representarla con el kanji japonés que expresa la palabra amor y también recuerda visualmente una llama. “Este amor - explica - por obra del Espíritu Santo, sigue ardiendo, para santificar el mundo y atraer a todos los pueblos al Padre”.