Terminó la condena, pero no hay noticias de la blogger que informó sobre la pandemia de Wuhan
Zhang Zhan, cristiana de 40 años y en primera línea de defensa de los derechos humanos en Shanghai, debería haber sido liberada hoy después de haber cumplido cuatro años de prisión, pero se impuso el silencio a su familia y no hay información cierta sobre ella. Los activistas que siguen su caso temen que su detención continúe bajo otras formas, como ya ha ocurrido en otros casos.
Shanghai (AsiaNews/Agencias) - Tras cumplir los cuatro años de cárcel a los que fue condenada por el clásico cargo de "iniciar discusiones y crear problemas", hoy debía ser el día de la liberación de Zhang Zhan, la blogger cristiana de Shanghai que en febrero de 2020 viajó a Wuhan y desde la ciudad epicentro de la pandemia de Covid 19 intentó contar durante tres meses como, "periodista ciudadana", lo que estaba ocurriendo. Al final del día, sin embargo, todavía no se había filtrado ninguna noticia desde la cárcel de mujeres de Shanghai donde cumplió su condena. Y los activistas de derechos humanos están preocupados por la posibilidad de que su detención simplemente continúe bajo otra forma.
De 40 años, licenciada en la Universidad Southwestern de Chengdu, era abogada aunque las autoridades locales de Shanghai ya le habían suspendido la licencia por sus luchas en favor de los derechos humanos. Había sido arrestada por primera vez en septiembre de 2019 por marchar con un paraguas por Nanjing Road, en Shanghai, en apoyo de las protestas en Hong Kong. Ante las primeras noticias sobre la pandemia viajó a Wuhan para documentar lo que estaba sucediendo y publicó cerca de un centenar de vídeos a lo largo de tres meses, respondiendo también a las preguntas de los medios internacionales. Detenida en mayo de 2020, fue el primer blogger condenado por difundir noticias sobre la pandemia.
En una nota que difundió esta tarde a las 19.30 de Beijing la campaña Free Zhang Zhan - que desde Gran Bretaña ha mantenido la atención sobre su caso - confirmó que no se ha recibido ninguna noticia de que la mujer haya salido realmente de la cárcel y se encuentre en su domicilio. “Sabemos que la familia de Zhang Zhan ha sido sometida a una enorme presión y ha recibido una severa advertencia para que no conceda entrevistas a los medios - dice el comunicado de esta tarde -. Las llamadas telefónicas de los amigos tampoco recibieron respuesta. Al menos un activista de Shanghai fue citado por la policía hace pocos días por expresar su intención de ir a recoger a Zhang Zhan a la salida de la cárcel junto con su madre. Una activista de Henan fue interceptada en una estación de tren cuando se disponía a viajar a Shanghai con la intención de saludar a Zhang Zhan o por lo menos mostrar solidaridad con ella fuera de la prisión de mujeres, pero le impidieron comprar el pasaje de tren".
La campaña “Free Zhang Xhan” habla de “señales extremadamente preocupantes”. “Si Zhang Zhan se encuentra en la misma situación que Chen Jianfang (otra activista que fue puesta bajo arresto domiciliario en octubre de 2023, cuando salió de la cárcel, ndr.), tendrá pocas posibilidades de recibir la atención médica urgente que necesita para recuperarse. Es absolutamente inaceptable que el gobierno chino someta a muchos defensores de los derechos humanos y a sus familias a este tipo de crueldades. Incluso después de su liberación, siguen privados de sus derechos fundamentales. Para algunos es como si les hubieran condenado a cadena perpetua".
“Ya deberíamos tener noticias de ella o de su familia - concluye la nota -. En cambio, nos preguntamos dónde está, cómo se encuentra física y mentalmente, qué pasó con su familia y qué le depara el futuro: ¿seguirá prisionera en su casa (como le pasó a Chen Jianfang)? ¿Quedará detenida en un centro médico sin acceso a su familia (como la activista de Hubei Yin Xu'an)? ¿Desaparecerá por la fuerza (como el abogado de derechos humanos Gao Zhisheng)? El silencio habla claro. Exhortamos a la comunidad internacional a pedir cuentas al régimen comunista chino por su horrenda práctica de 'detención suave' o 'no liberación' de los ex presos políticos".