Teherán se dispone a enriquecer uranio al 20%. El acuerdo nuclear, en creciente riesgo
La República islámica se dispone a reanudar la actividad de las centrifugadoras, que permanecían desactivadas en el marco del JCPOA. El líder de los Pasdaran precisa: no queremos armas nucleares, pues éstas son contrarias al islam. Para Washington, la política de máxima presión “está funcionando”. En el aeropuerto de Chicago, la selección de vóley iraní fue “detenida” por varias horas.
Teherán (AsiaNews/Agencias) - La guerra comercial, diplomática y verbal que Teherán y Washington libran hace más de un año suma nuevos capítulos: ayer, la cúpula de gobierno de la República Islámica amenazó con reactivar las centrifugadoras, que permanecían desactivadas desde la firma del acuerdo nuclear, e impulsar el enriquecimiento de uranio, alcanzando el umbral del 20% de pureza. Pese a ello, el líder de los Pasdaran (los guardianes de la Revolución islámica) precisa que Irán no tienen intenciones de continuar con el proyecto de armas nucleares.
La amenaza de aumentar el grado de enriquecimiento de uranio, lanzada por el responsable de la agencia nuclear de Teherán, es un paso que trasciende significativamente las decisiones tomadas en las últimas semanas. Representa el derrumbe de uno de los puntos clave del acuerdo y plantea serias dudas sobre su eficacia y validez actuales.
Las potencias internacionales, y en particular los Estados Unidos e Israel, sospechan que Teherán pretende reanudar el camino interrumpido cuatro años atrás, orientado a la construcción de una bomba atómica con fines militares. En este sentido, hubo una declaración rotunda del general mayor Hossein Salami, líder de los Pasdaran, que desmintió estas versiones, afirmando que “el mundo sabe que no estamos procurando armas (nucleares)”. Este tipo de armamento, agregó, “no tiene lugar en el islam”, ya que éste “no aprueba las armas de destrucción masiva”.
En el frente estadounidense intervino el consejero de seguridad nacional John Bolton, uno de los artífices de la línea dura contra Teherán, declarando que la “campaña de máxima presión” hecha a golpes de sanciones de los EEUU “está funcionando” y “el objetivo del presidente es suscribir un nuevo acuerdo, que será negociado considerando aquello que es mejor para los Estados Unidos”.
El origen de la tensión que rige entre Irán y los Estados Unidos -que ha desatado una gravísima crisis económica en la República Islámica, como fuera confirmado por un sacerdote local- radica en la decisión tomada en mayo del año pasado por el presidente de los EEUU, Donald Trump, al retirarse del acuerdo nuclear (JCPOA) del 2015. La Casa Blanca luego decidió introducir las sanciones más duras de la historia, reforzar la presencia militar en el área y aniquilar las exportaciones de petróleo iraní, afectando ante todo a la población.
En tanto, el enfrentamiento entre los dos países se ve alimentado por un capítulo deportivo: las autoridades iraníes ayer acusaron a los EEUU de haber “detenido” a la selección nacional de vóleibol en el aeropuerto de Chicago por varias horas. “Si América no es capaz de alojar a todos los equipos nacionales de una manera neutral y justa -subrayó un funcionario del ministerio de Relaciones Exteriores iraní- es mejor de deje de organizar eventos deportivos”.
El equipo de vóley de la República Islámica se encuentra en los Estados Unidos para participar en la final (final six) de la Nations League 2019. El team jugará el 11 de julio contra Polonia y al día siguiente contra Brasil, para conquistar el pase a la final. La agencia oficial Irna recuerda que en el pasado, la selección nacional viajó a los Estados Unidos para participar en partidas amistosas “y jamás se registraron problemas”.
27/06/2019 14:13
26/06/2019 12:05