Taipéi, protestas por la visita de un líder comunista chino

Un grupo de manifestantes se reunió en el aeropuerto de la capital para “recibir” a Sha Hailin, miembro de la Comisión permanente del PCC de Shanghái y jefe del Departamento del Frente Unido de la megalópolis. Es el funcionario comunista de mayor grado en visitar Taiwán desde que asumiera el nuevo gobierno conducido por Tsai Ing-wen. Dudas sobre el futuro de las relaciones bilaterales.

Taipéi (AsiaNews/Agencias) – Un grupo de activistas que luchan por la independencia de Taiwán se manifestó esta mañana en el aeropuerto de Taipéi rechazando la visita de un alto oficial del Partido comunista chino. Sha Hailin es miembro de la Comisión permanente del PCC de Shanghái y jefe del Departamento del Frente Unido de la megalópolis; llegó a la isla para una reunión de intercambio con la capital. Pero los autores de la “libertad taiwanesa de las injerencias chinas” lo recibieron con protestas y pancartas, y al mismo tiempo acusaron al intendente de Taipéi de “perjudicar nuestra identidad”

Desde que fue elegida la nueva presidente Tsai Ing-wen, es la primera vez que una delegación china de semejante rango llega a la ex Formosa. Los dos mandatos del predecesor de Tsai, el nacionalista Ma Ying-jeou, se caracterizaron por un restablecimiento de las relaciones entre Beijing y Taipéi: surgidas sobre una base comercial y turística, estas relaciones han modificado el status quo del Estrecho de Taiwán.

China continental ha mantenido a raya las reivindicaciones sobre la ex colonia portuguesa, pero ha incrementado el intercambio comercial, llegando a acaparar una buena parte de los ingresos taiwaneses. Por su parte, Taiwán ha mejorado su economía, pero –según quienes son críticos de las nuevas relaciones- ha “renunciado a su independencia”.

En una de las pancartas exhibidas a la llegada del funcionario se leía “Expulsemos la propagando comunista, defendamos nuestra solidaridad” y también “Sha Hailin, ¡vete!”. Luego de un breve enfrentamiento con la policía, los manifestantes fueron convencidos de dejar el aeropuerto de una manera pacífica. Por su parte, Sha no quiso comentar lo sucedido.

No está del todo claro cuál será el camino elegido por Tsai en el campo minado de las relaciones con Beijing. Lo que sí puede aseverarse es que la presidente no ha querido reconocer en público el principio de “Una sola China”, que conforma la base diplomática para las relaciones en el estrecho. En respuesta, la Oficina china para los Asuntos taiwaneses suspendió todos los contactos oficiales con el nuevo Ejecutivo.