Sri Lanka, en peregrinación de la Virgen contra el abuso en la familia y en el trabajo

de Melani Manel Perera

Las 45 participantes, todas fieles de la Arquidiócesis de Colombo, participaron en un retiro que tuvo lugar en la Basílica de Nuestra Señora de Lanka en Tewatte. El día se ha dividido entre un Vía Crucis, el rezo del Rosario y la santa Misa.

Colombo (AsiaNews) - "La oración en comunión es más fuerte que hacerla solo. Es una oportunidad para unirnos como una sola familia y meditar en nuestras vidas, cerca uno del otro para la experiencia y el dolor". Así un grupo de 45 mujeres describe el encuentro de oración organizada en la Basílica de Nuestra Señora de Lanka en Tewatte el 21 de febrero.

Originarios de la Arquidiócesis de Colombo, los participantes compartieron historias de abuso: tanto en la familia, de parte del marido, como en el lugar de trabajo. Durante el encuentro se realizó un Vía Crucis, recitaron el rosario y terminaron el día con una misa.

"Es un gran consuelo - una mujer le dice a AsiaNews de Moratuwa - habernos reunidos aquí juntas, con nuestras experiencias. A través del Vía Crucis, reflexionamos sobre nuestra vida: Cómo estábamos y cómo estamos hoy, en los errores que hemos cometido y cómo podemos poner remedio a esto. Por último, hemos prometido con determinación de no repetirlos de nuevo".

El corto retiro fue organizado por la Hermana Nilanthi Ranasinghe, coordinadora para Sri Lanka del Asian Movement of Women Religious Against Human Trafficking (Amrat). "Todos los años - explica la religiosa a AsiaNews - preparamos ejercicios espirituales para estas mujeres. En el de este año hemos meditado sobre la Pasión de Cristo y el amor de la Madre María".

Durante la Vía Crucis, Sor Nilanthi empujó a los participantes a reflexionar sobre sus responsabilidades como madres y esposas, pidiéndoles mirar dentro de sí mismas y encontrar los desafíos peligrosos que se encuentran en su camino. La religiosa luego le pidió que oren por todas las chicas jóvenes que han perdido la esperanza y la fe en Jesús, por las cosas malas que les sucedieron en su vida.