Singapur: la IA y las nuevas tecnologías alimentan el analfabetismo atrasado

de Steve Suwannarat

Esta es la conclusión de una investigación de la OCDE que preocupa a las autoridades. Se están estudiando programas para reforzar los niveles educativos. Preocupación por la competitividad del sistema del país, con repercusiones en el empleo, la mano de obra cualificada, la coherencia salarial y el bienestar de los trabajadores.

Singapur (AsiaNews) - Un estudio publicado en diciembre por el Programa para la Evaluación Internacional de las Competencias de los Adultos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) confirmó la disminución de los conocimientos y las formas de analfabetismo entre los singapurenses tras abandonar la escuela. Una situación que se debe en parte a la distancia temporal de la adquisición de nuevos conocimientos, pero también a la falta de actualización de las competencias aplicables al mundo laboral.

Por lo que respecta a la ciudad-Estado, el estudio contiene datos actualizados procedentes de una encuesta realizada a 5.000 ciudadanos y residentes permanentes de edades comprendidas entre los 16 y los 65 años, relativos a la educación formal más allá de los 15 años desde el final de la enseñanza obligatoria, así como a la capacidad de adaptación a las nuevas necesidades. La fuerte disminución de los conocimientos más allá de los 35 años y la tendencia a empeorar constantemente a partir de entonces no afecta únicamente a Singapur, presentándose como un fenómeno mundial; sin embargo, la constatación de que los conocimientos de la población local de edad avanzada son inferiores a la media de los países de la OCDE (los de mayor desarrollo) llama a las autoridades a buscar razones e iniciativas para remediar la situación. En una sociedad altamente productiva y cada vez más envejecida, que sin embargo sigue teniendo (o pretende tener) en el alto nivel de preparación y conocimiento uno de sus datos fundamentales, la coincidencia sustancial de las tendencias señaladas con datos ya presentes y debatidos ha hecho saltar las alarmas. Y con ella un proceso de escucha de la sociedad civil para recabar opiniones y propuestas.

Varios parlamentarios plantearon preguntas tras la publicación del estudio, solicitando respuestas al Ministerio de Educación sobre cómo garantizar un nivel necesario de educación y preparación de los singapurenses a distintas edades. Y, al mismo tiempo, cuáles podrían ser las repercusiones de la situación puesta de manifiesto en cuanto al acceso al trabajo de los mayores de 35 años.

Una situación que pone en cuestión, como señaló el ministro responsable Chan Chun Sing, el uso intensivo de la tecnología aplicada a los procesos de información que prescinde cada vez más de la necesidad de una escritura compleja en favor de una comunicación más breve e inmediata en las redes sociales: «A medida que la externalización cognitiva se hace más frecuente con la IA, existe el riesgo de erosión del pensamiento y las reflexiones más profundas», dijo.

Los riesgos de esta atrofia son evidentes, más aún en una realidad como la local que requiere altas competencias, rápidos tiempos de adaptación y productividad. Los riesgos, subrayó la Ministra Chan, no son sólo los de menos conocimientos y menos capacidad para expresarlos en el contexto social. Las consecuencias, de hecho, podrían ser graves para la competitividad del sistema-país al aumentar la tasa de empleo, reducir el número de empresas dispuestas a invertir en mano de obra cualificada, disminuir la coherencia de los salarios y, por tanto, el bienestar de los trabajadores.