Seúl, los refugiados del Norte "desocupados y tratados siempre peor"
Seúl (AsiaNews)- Los refugiados de Corea del Norte que encuentran refugio en la parte sur de la península viven siempre peor: aumentan la tasa de desocupación y las horas de trabajo impuestas por los que les ofrecen trabajo, mientras que les rebajan los sueldos respecto a la media de los coreanos del sur. Lo revela un sondeo relativo al año 2014, realizado por la Fundación Hana, que ayuda a los exilados (llamados en coreano "saeteonim") que tratan de rehacerse una vida lejos del régimen dictatorial de los Kim.
Los números relativos a la población nord-coreana que ha abandonado el propio país no son oficiales: el gobierno de Seúl, de hecho, se considera "capital legítima" de toda la península y por lo tanto acepta a quien escapa del Norte como su propio ciudadano. Sin embargo, las estimaciones indican que son más o menos unos 500 mil nord-coreanos los que residen en modo estable ene l Sur. De éstos el 53% ha trabajado en el 2014; se trata de un aumento de casi el 8% respecto a la tasa de ocupación nacional.
El 19,8 de los refugiados trabaja cotidianamente, sin contrato y sin garantías: el dato relativo a los sudcoreanos tratados en e l mismo modo está en los 6%. Además, los nord-coreanos "empresarios" ( o sea aquellos en grado de darse en modo autónomo un empleo) son solamente el 6%, contra el 16,2% de los sudcoreanos. Los expertos explican que este dato nace de las dificultades burocráticas y por la imposibilidad de obtener un préstamo bancario por parte de los exilados, mirados tradicionalmente en modo negativo y despreciativo ene l Sur.
También los salarios de aquellos que tiene un empleo demuestran un trato diverso: en una media de 47 horas de trabajo por semana (unas 3 horas más respecto a los sudcoreanos), los nord-coreanos ganan unos 750 dólares menos respecto a la contraparte. El período medio de un exilado en e l mismo lugar de trabajo es de 19 meses, contra los 67 meses del resto de la población.
No obstante estos datos, el 67% de los entrevistados dice que están "satisfechos" de sus propia vida: el 47% lo explica por el hecho de estar en el Sur "les da mucha más libertad para hacer lo que quiere", respecto al Norte, mientras que el 42,3% responde con un simple: "Siempre mejor aquí que allá". Sin embargo el 58% de los refugiados admite que normalmente "no mencionan la propia proveniencia un aumento de 4 puntos porcentuales respecto al 2012) y el 25,3% habla de "claros actos discriminatorios" sufridos por parte de los sudcoreanos.
"Saetomin" en coreano significa "refugiados, colonos", y es el término con el cual los sudcoreanos llaman a aquellos que logran escapar del régimen de Pyongyang para establecerse al otro lado del confín. Con el tiempo, dado el bajísimo nivel de integración de los exilados, se convirtió en una palabra despreciativa. Ya desde tiempos del armisticio que interrumpió la Guerra de Corea (1953), la Iglesia católica del Sur lleva adelante programas de inserción y de sensibilización social para cambiar esta actitud discriminatoria en relación con los exilados.
Entre las varias obras, resaltan el Centro católico en las cercanías de la frontera con el Norte al uso de internet y a la búsqueda de un trabajo que a nivel diocesano acompañan a estas personas hacia un ingreso digno en la sociedad.
26/07/2023 16:04