Sínodo: concluyó la fase continental, a fines de mayo el Instrumentum laboris
En rueda de prensa en el Vaticano, el balance de las asambleas continentales que se celebraron en los últimos meses con vistas a la reunión de octubre, mientras una comisión trabaja en la síntesis que guiará el debate. Mil "misioneros digitales" implicados en el trabajo paralelo que se llevó a cabo en línea. También se escuchará la experiencia de las otras Iglesias cristianas sobre la sinodalidad.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - El Instrumentum Laboris del Sínodo previsto para octubre no será un resumen académico o un recuento estadístico de los temas más abordados en el camino sinodal, sino un discernimiento espiritual. Y la Secretaría General tiene la intención de publicarlo a finales de mayo. Es lo que se ha puesto de manifiesto esta mañana en la conferencia de prensa que se celebró en el Vaticano al concluir la fase continental del Sínodo, que culminó con las siete Asambleas celebradas a nivel local en estos primeros meses de 2023 para sintetizar las prioridades que surgieron en ellas.
Fue la Hna. Nathalie Becquart -que como subsecretaria de la Secretaría General del Sínodo participó en nada menos que cuatro Asambleas continentales- quien destacó algunos rasgos particularmente significativos de estos momentos. "En primer lugar, la centralidad de la experiencia del encuentro más allá de los documentos", citó la religiosa francesa. "Por ejemplo, la Asamblea de las Iglesias de Medio Oriente, que se celebró en Líbano pocos días después del terremoto de Turquía, fue una ocasión de consuelo. Para algunos en África, venir a esta reunión eclesial en Addis Abeba fue incluso la primera oportunidad de salir de su país...".
Las Iglesias de cada continente tuvieron la oportunidad de destacar los rostros de la sinodalidad más cercanos a su propia experiencia: "La atención a la custodia de la creación en Oceanía, el ecumenismo y la liturgia en Medio Oriente, la Iglesia como familia de Dios en África, la dimensión de la interioridad y la armonía en Asia. Otro hecho importante es que, con el creciente fenómeno de las migraciones, ninguna Iglesia local puede hoy realmente pensarse a sí misma sólo desde su comunidad de origen. En este sentido, es interesante que precisamente las comunidades de la Península Arábiga, donde están presentes cristianos de tantas nacionalidades diferentes, hayan aportado a la Asamblea de Medio Oriente el testimonio de un hermosísimo camino sinodal".
Otra cuestión crucial es el tema de la inculturación: "¿Cómo podemos ser una sola Iglesia en esta diversidad de culturas y contextos? - lo resumió la Hna. Becquart-. La cuestión de lo que se debe decidir a cada nivel es uno de los temas que está surgiendo. Como también lo es el deseo de reforzar precisamente esta dimensión continental".
Ahora, una comisión de expertos está trabajando en los documentos finales que cada una de estas siete Asambleas envió a Roma, y agrupa a obispos, sacerdotes, religiosos y laicos, hombres y mujeres con distintas perspectivas, trayectorias y experiencias. Se reunieron en Roma la semana pasada y su contribución a la redacción del Instrumentum Laboris fue comentada durante la rueda de prensa por el Arzobispo de Perth, Timothy John Costelloe, Presidente de la Conferencia Episcopal de Australia. "Nos dimos tiempo para rezar -explicó-, para reflexionar sobre lo que leíamos, para hablar abiertamente y escucharnos unos a otros. Sólo entonces empezamos a discernir juntos los temas, las prioridades y los puntos de tensión que debíamos ofrecer como contribución al borrador del Instrumentum Laboris". Un aspecto importante de esta semana fueron los encuentros con los dicasterios de la Curia romana. Fueron en sí mismos buenos ejemplos del estilo que está en el corazón del camino sinodal: "diálogos abiertos, atentos, respetuosos en el hablar y en el escuchar".
Al mismo tiempo, en los últimos meses ha continuado también el "sínodo digital", el modo de participación que precisamente se llevó a cabo en los "espacios digitales" de la web, para llegar a aquellas personas que no participan en las instituciones eclesiales pero que quieren seguir este camino de la Iglesia. El arzobispo Lucio Adian Ruiz, secretario general del Dicasterio para la Comunicación, hizo un balance y habló de 1.000 “misioneros digitales” implicados con un “potencial de 20 millones de seguidores”. Participó una amplia población, principalmente en la franja de edad de 18 a 40 años, incluyendo un 30% de no creyentes o personas alejadas de la Iglesia. Se recogieron 150.000 cuestionarios procedentes de 115 países. "Los jóvenes -explicó monseñor Ruiz- han encontrado una dinámica más adaptada a ellos, en cuanto a tiempos, formas y metodologías. Los no creyentes, un camino de acercamiento y diálogo que les ha permitido expresarse con mayor libertad".
Por último, otra dimensión importante del camino sinodal fue la ecuménica, promovida por el Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos. "En la lógica del intercambio de dones", explicó el p. Hyachinte Destivelle, "uno de los que los católicos podrían recibir de otros cristianos es precisamente su experiencia sinodal". En este sentido, entre 2022 y 2023 se organizaron cuatro conferencias internacionales centradas en la comprensión y la práctica de la sinodalidad en las cuatro grandes tradiciones cristianas: ortodoxos, antiguas Iglesias orientales, protestantes históricos y nuevas realidades eclesiales.
09/10/2021 17:41
27/10/2022 18:25