Pétalos de rosa para los peregrinos de Shiva; palizas y arrestos para los cristianos

de Nirmala Carvalho

Desde un helicóptero, el jefe de policía y el administrador local lanzan pétalos de flores sobre los Kanwariyas, los peregrinos del dios Shiva. Con el tráfico y la seguridad revueltos, se desatan hechos de violencia y vandalismo. Pero la policía hace la vista gorda. Un listado de los hechos de violencia contra los cristianos en Uttar Pradesh.

Nueva Delhi (AsiaNews) – Mientras en Uttar Pradesh crecen el vandalismo y la violencia perpetrada contra los cristianos, las autoridades de la India “laica” continúan demostrando su “preferencia” por los fieles hindúes.

Ayer, oficiales de alto rango de la policía y miembros del gobierno de Meerut (una localidad ubicada a 62 km al noreste de Delhi), incluso lanzaron pétalos de rosa desde un helicóptero, para saludar a los peregrinos kanwar. Un video, que fue compartido velozmente en las redes sociales, muestra al director general adjunto de la policía, Prashant Kumar, arrojando puñados de pétalos de rosa mientras sobrevuela la zona en tareas de inspección. Lo acompaña el gobernador de Meerut.

Kanwar Yatra es la peregrinación anual realizada por los devotos del dios Shiva. En la misma, los peregrinos transportan agua del río Ganges con la cual llenan recipientes, que son colgados del extremo de un bastón. Los peregrinos -denominados Kanwariyas- caminan de esta manera, a lo largo de cientos de kilómetros, con los pies descalzos.

Ante las acusaciones de “favoritismo” -a raíz del lanzamiento de pétalos de rosa- difundidas en las redes sociales, Prashant Kumar hoy respondió resaltando que “arrojar flores es una costumbre para dar la bienvenida a la gente, y no tenemos que atribuir ningún motivo religioso a este gesto. Nuestra administración respeta todas las religiones y participa activamente en las fiestas de Gurupurab [fiesta sij], Eid [fiesta musulmana], Bakrid [Id al-adha, fiesta musulmana], o las fiestas jainas”.

El jefe de la Policía, junto a otros colegas, estaba monitoreando las medidas de seguridad y controlando el tráfico, que sufrió innumerables trastornos durante la peregrinación, debido a que miles de peregrinos cruzaron la ciudad para dirigirse a Uttarakhand, y allí recoger el agua del río sagrado.

El hecho de que la policía muestra “favoritismos” hacia estos peregrinos queda asimismo demostrado por la ligereza con que tratan sus gestos de vandalismo. Dos días atrás, en Moti Nagar, cerca de Delhi, un grupo de Kanwariyas destruyó un auto a palazos y garrotazos, luego de que el auto intentara avanzar por la calle, repleta de peregrinos, tocando a uno de ellos sin advertirlo. El periódico “The Hindustan Times”, al reportar el accidente, afirma que “los hechos de violencia y los enfrentamientos se reportan todos los años” en el período del Kanwar Yatra. Y recuerda el estilo “ilegal” de ciertos peregrinos que no caminan sobre los carriles reservados especialmente para ellos, o que no usan el casco protector (en el caso de los peregrinos que hacen el camino en motocicleta).

En diálogo con AsiaNews, Sajan K George, presidente del Global Council of Indian Christians, sostiene: “La policía y las autoridades de gobierno de Uttar Pradesh arrojan pétalos de flor desde los helicópteros para los devotos del Kanwar Yatra, envueltos en sus trajes de color amarillo azafrán [el color de los devotos y eremitas hindúes -ndr]. Mientras tanto, los frágiles cristianos pentecostales de Uttar Pradesh sufren varios ataques. Es más, incluso se han aplicado restricciones a la comida, por ley. Como ha afirmado el superintendente de la policía, Rajesh Kumar Pandey, a todos los restaurantes y tiendas donde sirven comida que no es vegetariana, se les ha pedido que permanezcan cerrados, o que sirvan exclusivamente comida vegetariana durante los días del Kanwar Yatra”.

Luego, al recordar el episodio de Moti Nagar, agrega: “La violencia de parte de los “azafranados” es ignorada por una policía que permanece impávida, inmóvil”.

“Estos incidentes continúa- son señales preocupantes para las comunidades minoritarias de Uttar Pradesh, que viven en un clima de miedo. La India es un país laico, lo cual significa igual tratamiento para todas las religiones del Estado. Sin embargo, estos signos de preferencia -de la policía y de la administración pública provincial- por los “azafranados” llevan a los cristianos a una mayor marginación”.

A continuación, Sajan K George hace un listado de los ataques perpetrados contra los cristianos en Uttar Pradesh, sólo considerando el mes de julio:

El 2 de julio, un grupo de radicales hindúes azotó a 150 cristianos que estaban orando en un salón de la localidad de Raikashipur (distrito de Pratapgarh). Más de 20 fieles resultaron heridos; a algunos les quebraron las piernas o los brazos.
El 9 de julio, el pastor Sabu Thomas, que estaba rezando con una familia en casa de ésta última, en Lucknow, fue arrestado por conversiones forzadas, y fue liberada luego de varias horas.
El 15 de julio, los radicales hindúes y la policía interrumpieron un servicio de oración que se estaba desarrollando en la localidad de Birne. Y a los cristianos se les ordenó no tener más encuentros de este tipo, y no desarrollar ninguna actividad sin permiso previo de las autoridades.
E 19 de julio, un pastor cristiano y su hijo recibieron una paliza: el motivo, haber echado a un perro callejero de su iglesia.