Profesor de Indonesia: perdoné al asesino de mi hijo, pero apoyo la pena de muerte

de Mathias Hariyadi

Koerniatmanto Soetoprawiro, de la Universidad Católica Parahyangan, comenta la llamada del Papa Francisco para la abolición de la pena capital: "Incluso si el delincuente muere, mi hijo no va a volver a la vida. Yo prefiero la misericordia, aunque apoyo la pena de muerte para los narcotraficantes". De 1979 a 2015, en Indonesia se han llevado a cabo 66 ejecuciones por delitos que van desde la corrupción política hasta el terrorismo.

Yakarta (AsiaNews) - Decidí "perdonar al asesino de mi hijo, no tengo ni idea de quién es y no tengo intención de conocerlo. Tomé esta posición porque no quiero que mi corazón se llene solamente por sentimientos de venganza. Y no quiero aunque sea descubierto por la policía, que sufra la pena de muerte. Mi hijo no volverá a la vida, incluso si el tribunal decide sobre la pena de muerte". Con estas palabras Koerniatmanto Soetoprawiro, profesor de derecho en la Universidad Católica de Parahyangan (Java Oeste), cuenta a AsiaNews sobre el proceso difícil que le llevó a perdonar al hombre que en abril de 2012 mató a su segundo hijo, Harrindaka Maruti mientras robaba su casa.

El profesor expresó su opinión sobre la pena de muerte en vigor en Indonesia, a raíz de una llamada del Papa Francisco el 21 de febrero pasado para la supresión y la moratoria sobre las condenas durante el Jubileo de la Misericordia. Por un lado, Soetoprawiro prefiere "hablar sobre el tema desde la perspectiva de la misericordia", perdonando al asesino de su hijo; por el otro, el profesor está a favor de la pena de muerte para los traficantes de droga, "asesino silencioso" de miles de jóvenes: "Con el tiempo se ha vuelto cada vez más necesario castigar a estas personas a la muerte, debido a que continúan con su sucio mercado también detrás de las rejas. Por un lado, estoy muy de acuerdo con la Iglesia Católica que promueve la cultura de la vida. Pero, por el bien de la humanidad y los jóvenes, la Iglesia debe generar una nueva corriente de pensamiento teológico que les preservo de la influencia negativa del asesino silencioso".

De 1979 a 2015, en Indonesia se han llevado a cabo 66 ejecuciones por delitos que van desde la corrupción política hasta el terrorismo. En enero de 2015, seis personas vinculadas con el tráfico de drogas han sido muertos por el pelotón de fusilamiento. En la actualidad, 64 personas están en espera de ejecución, todos por tráfico de drogas. Entre ellos hay 28 indonesios y ocho nigerianos.

El país se ha discutido mucho la decisión tomada el año pasado por el presidente Joko Widodo, para que también los traficantes de droga lleguen frente al pelotón de fusilamiento. AsiaNews ha reunido diferentes opiniones sobre el asunto.

Según Joseph Umarhadi, político católico, la la llamada del Papa Francisco hay que ponerla en práctica: "Como católicos, nuestra misión es promover el espíritu de perdón entre las personas, ayudando a que se arrepientan de sus pecados y perdonando a los demás. Si tenemos éxito en esto, no hay ninguna base teológica a favor de la pena de muerte".

Una visión diferente tiene Ibnu prakoso, político y ex candidato a vicegobernador de Banten: "La pena de muerte sigue siendo necesaria y debe aplicarse en relación con delitos graves, como la mafia de la droga. No puede haber piedad para ellos. En cuanto a los autores de otros delitos, acepto que la pena de muerte debe ser reconsiderada. En este sentido la llamada del Papa Francisco se debe apoyar"